El entrenador del Avilés, Pablo Lago, tiene a los 22 jugadores de la plantilla disponibles por primera vez en lo que va de temporada y podrá elegir el mejor once posible para afrontar el derbi del próximo domingo (17.30 horas) contra el Langreo en Ganzábal, uno de los partidos más esperados por las respectivas aficiones y más comprometidos de la Liga para los dos equipos.

La principal novedad para el derbi es la vuelta de Matías, ausente la pasada semana ante el Mosconia en el Suárez Puerta por sanción tras ser expulsado por doble cartulina amarilla en Tineo, una vuelta que se complementa con la recuperación de varios jugadores que pasaron por algún problema físico en las últimas jornadas, como Rubén Palazuelos, Michael Awaah, Sergio Ríos y Álex García. Son jugadores que van cogiendo el ritmo poco a poco y recuperando su mejor forma.

Caso aparte es Álex Arias, que lleva cuatro semanas entrenando con el equipo y al que el cuerpo técnico quiere dosificar porque estuvo más de un año sin jugar aunque tuvo minutos desde que llegó en la tercera jornada liguera. "Yo creo que le queda poco pero queremos ir con calma porque queda mucha Liga y no queremos que se queme mucho al principio, aunque él tiene muchas ganas de ser útil y para nosotros va a ser un jugador vital, tremendo", comentó Lago. Y añadió: "Álex tiene que estar muy tranquilo y darse cuenta de que tiene que ir sumando poco a poco porque sus ganas de volver no le pueden generar ansiedad".

El hecho es que a día de hoy todos podrían entrar en la convocatoria ante el Langreo y jugar. El joven delantero Sergio Ríos es el que más justo llega porque se acaba de recuperar de un fuerte golpe en la cadera y está un poco más bajo físicamente que el resto, pero también podría salir en caso necesario.

Rubén Palazuelos y Álex García ya tuvieron minutos ante el Mosconia al sustituir a Seger (minuto 63) y a Luismi (75) respectivamente, y Michael Awaah está entrenando con normalidad después de parar la pasada semana por problemas en la boca.

La buena salud del equipo es "una excelente señal" para el técnico blanquiazul que está "encantado" de tener problemas para elegir el once y la propia convocatoria. La competencia es ahora máxima entre los jugadores por un puesto, sobre todo del centro del campo hacia arriba, y todos están dando el máximo en los entrenamientos para poder vestirse de corto cada fin de semana.