El Femiastur sufrió ayer, a manos del conjunto vigués Atlántida Matamá, su primera derrota de la temporada en la tercera jornada liguera. El conjunto gallego aplicó un duro correctivo (0-4) a las de Rubén Blaya en un partido duro y disputado, que se jugó en las instalaciones deportivas de La Toba. Blaya optó por un equipo formado por Casasola, Abati, Sol, Paula, Elizabet, Andrea, Celorio, Lorena, Libertad, Carballo y Miranda; que empezó dominando el encuentro. Las avilesinas tenían el balón, pero no lograban profundidad para hacer daño a la portería gallega, defendida por la capitana Kily.

Así las cosas, las gallegas lograron perforar la meta de Casasola mediada la primera parte, en una jugada aislada. Tras el gol, el guión fue el mismo. El Femiastur mantenía una posesión estéril del balón, mientras las gallegas, puro corazón y fuerza, arremetían contra el arco local a base de contraataques. De esta guisa subió el segundo tanto al marcador. Cuando quedaban pocos minutos para que el árbitro pitase el descanso, una nueva acometida de las viguesas logró abrir la brecha en el tanteo, echando un jarro de agua fría sobre la moral de las locales.

Tras la reanudación, las chicas dirigidas por Rubén Blaya saltaron al sintético de La Toba con la intención de acortar distancias en el marcador. Pero, nuevamente, fueron las gallegas, muy efectivas durante todo el encuentro, las que se llevaron el gato al agua, poniendo el 0-3.

Pese a la distancia, prácticamente insalvable, las avilesinas no perdieron en ningún momento la cara al partido, y buscaron el gol por todos los medios. Ya en el tiempo de descuento, y con las locales volcadas en ataque, llegó el cuarto y único gol que certificó la primera derrota de la temporada del cuadro de Rubén Blaya.

Este resultado deja al Femiastur en mitad de la tabla tras tres joranadas disputadas. El próximo fin de semana a las de Rubén Blaya les espera el Torodia de Santiago de Compostela.