El filial sportinguista volverá a tener una nueva prueba que, sobre el papel, se puede asemejar con lo que se encontró hace dos jornadas ante el Lenense: un muro defensivo. Es obvio que cada equipo juega sus cartas y la intención de frenar al equipo de José Alberto es acumulando jugadores en la parcela defensiva, juntando las líneas con los centrocampistas. Eso es lo que espera el técnico rojiblanco ante la visita del Praviano, que se encuentra situado en la penúltima posición de la tabla. El último rival que pasó por el Pepe Ortiz, el Lenense, lo planteó así y, al menos, fue capaz de frenar el vendaval ofensivo de los rojiblancos, aunque no así de evitar la victoria de los rojiblancos por 2-0.
El técnico José Alberto tratará de que sus futbolistas salgan con los dientes afilados para intentar desatascar pronto el partido y no meterse en complicaciones inesperadas. "Seguro que plantearán un repliegue bastante intensivo en defensa", advierte el técnico, que no podrá contar en esta ocasión con la participación del defensa Víctor Ruiz y el centrocampista Cayarga. A ellos se suma la ausencia por sanción de Cristian Salvador, que cumplirá su segundo y último partido de castigo tras ser expulsado contra el Lenense.
El Sporting B no quiere dejar escapar ningún punto del Pepe Ortiz dada la extrema igualdad que se prevé en la clasificación y en el que cada punto puede marcar las diferencias al término de la temporada. Por ello, esta mañana, a partir de las 12 horas, tratará de sumar un nuevo triunfo que le mantenga en lo más alto de la clasificación.
Un liderato que para los futbolistas ha significado una recompensa a su trabajo. El Sporting B está de dulce en cuanto a juego y resultados, acompañado además con el olfato goleador, en especial el del delantero Claudio, que ya se ha situado en lo más alto de la tabla de goleadores igualado con siete tantos con Jorge Rodríguez (Avilés). Es una batalla secundaria, pero que habla a la perfección del buen momento del filial.
