Un golazo del Celta B al final del primer tiempo le costó la derrota al Lealtad en su campo. El equipo de Roberto Aguirre, de nuevo bien en defensa, mostró sus carencia en la fase ofensiva, ya que no pudo rentabilizar su dominio en la segunda parte pese a que dispuso de alguna ocasión, sobre todo a balón parado.
En el primer tiempo el control estuvo repartido, pero las ocasiones más claras fueron para el Celta B ante un Lealtad bien plantado defensivamente. Los visitantes lanzaron el primer aviso en el minuto 16 con una falta lejana lanzada por Gus que se fue alta por poco. Poco después replicó el Lealtad con una contra de Gállego y David Grande la por banda derecha, que acabó con un recorte de Grande dentro del área y un tiro algo forzado que atrapó Iván.
En el minuto 29, un desajuste defensivo del Lealtad fue aprovechado por Borja Iglesias, que enganchó una chilena dentro del área dirigida a la escuadra izquierda, a la que respondió Javi Porrón con un desvío a córner. En el tramo final de la primera parte, el filial céltico fue superior y creó las ocasiones más claras. Así, un centro de Gus se paseó por el área entre defensores y atacantes hasta estrellarse en el poste izquierdo. Un minuto después llegó el único gol, en una jugada individual de Hicham que, ante la falta de respuesta defensiva, envió un disparo duro y colocado a la escuadra izquierda.
En la segunda parte el Lealtad buscó la portería del Celta B hasta el final y dispuso de más ocasiones. En el minuto 50, una falta lejana de Álex Blanco fue rematada en el frontal del área por Yosu y el semifallo del portero estuvo a punto de suponer el empate. El Celta B replicó con un centro de Samuel que remató en el segundo palo Borja Iglesias, pero Porrón desvió a córner junto al poste derecho.
En el 64 otra falta, lanzada en esta ocasión por Álvaro Muñiz, fue cabeceada por David Granda y detenida por Iván. El Celta lo intentó con un disparo lejano de Juan Mera que obligó a intervenir a Porrón en dos tiempos. En el 79, Omar enganchó un rechace al borde del área y su remate salió por encima del larguero. El Lealtad continuó el asedio, pero sólo inquietó con un disparo lejano de Jandrín atrapado por Iván.
