Un diezmado Barcelona Lassa, con hasta cuatro bajas por lesión, cogió aire este viernes ante el Brose Bamberg (78-74) y puso fin, así, a dos derrotas consecutivas en la Euroliga, en un partido tosco en el que la inspiración de Tyrese Rice (18 puntos y 6 asistencias) dio alas a los azulgranas.

El base estadounidense, autor de 9 puntos en el último periodo, lideró a los catalanes para sumar un sudado triunfo, el segundo en la máxima competición europea, ante un rocoso rival que plantó cara en el Palau Blaugrana con Fabien Causeur (19) y Daniel Theis (19), como puntales.

Azotado por la plaga de lesiones, regresaba diezmado el Barcelona a su feudo con hasta cuatro bajas -Navarro, Ribas, Lawal y Doellman- y una buena noticia: el regreso de Petteri Koponen después de cinco semanas en el dique seco como consecuencia de un accidente de tráfico.

El base finlandés, que jugó 15 minutos y 36 segundos, entró en el primer cuarto (min.6) para dar un respiro a sus compañeros, desgastados tras el último maratón de encuentros.

Le costó al Barcelona encontrar el dinamismo en ataque ante la dura defensa del equipo teutón y el poco acierto desde la línea de 6,75 metros (2 de 7 intentos en los primeros 20 minutos).

Solo los chispazos de Rice y Tomic, que se cargó rápidamente con dos faltas, así como el orgullo de Claver daban algo de luz a un encuentro defensivo en el que Causeur mantenía a flote al Brose Bamberg.

El exbase del Baskonia se erigió en el líder de su equipo con 10 puntos que permitieron a los de Andrea Trinchieri firmar las tablas tras los primeros diez minutos (19-19).

Dio descanso Bartzokas a Rice y su equipo lo notó, especialmente, en la dirección de juego. Perdía balones el Barcelona y lo aprovechaba el Brose Bamberg para firmar un parcial de 0-6 de la mano de Miller y Causeur (27-32, min.14).

Salió al rescate Rice y mejoró algo el juego azulgrana que, con un voluntarioso Vezenkov (5 puntos en el segundo cuarto), conseguía una renta de cuatro puntos (36-32, min.18) tras completar un parcial de 9-0.

Causeur y Strelnieks ponían tierra de por medio antes del descanso para evitar que el Barça se dirigiera al vestuario con una ventaja superior (40-38).

Tras la reanudación, reapareció Tomic y llegaron los triples de Claver y Perperoglou, lo que permitía a los locales gozar de una renta más holgada (57-50, min.27), si bien el Brose Bamberg no bajaba los brazos aupado por los puntos de Theis y Melli, sus versátiles jugadores interiores.

En éstas, afrontaba el Barcelona los últimos diez minutos con una mínima ventaja de dos puntos (59-57). Asumió Rice la riendas del equipo con dos triples consecutivos que, sumado a la férrea defensa de sus compañeros, dio a los de Bartzokas una renta de siete puntos (67-60) a falta de seis minutos para el final.

En las filas alemanas, sólo Theis, castigando desde el exterior a Dorsey, y Miller conseguían superar el entramado defensivo del preparado griego.

Un 'alley-oop' dibujado por Rice y completado por Dorsey encendía las alarmas en el banquillo alemán, cuyo técnico se veía obligado a pedir un tiempo muerto a 3 minutos y 51 segundos del final (73-65).

Lejos de desanimarse, los de Trinchieri no bajaron los brazos y, de la mano de Theis, Strelnieks y Miller, completaron un parcial de 3-9 que hizo temblar a los azulgrana, que aprovecharon su experiencia para solventar un encuentro incómodo.

78 - Barcelona (19+21+19+19): Rice (18), Oleson (6), Perperoglou (11), Claver (13), Tomic (11) -cinco inicial-, Dorsey (8), Vezenkov (9), Peno (-), Eriksson (-), y Koponen (2).

74 - Brose Bamberg (19+19+19+17): Causeur (19), Strelnieks (7), Heckmann (-), Melli (6), Veremeenko (2) -cinco inicial-, Zisi (4), Staiger (3), Theis (19), Lo (5), Miller (7) y Radosevic (2).

Árbitro: Belosevic (Serbia), Damir (Eslovenia) y Balak (Israel).

Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada de la Euroliga disputado en el Palau Blaugrana ante 5.074 espectadores. Antes del encuentro los jugadores mostraron una camiseta de apoyo a Pau Ribas, que ante el Estrella Roja de Belgrado padeció una grave lesión en el talón de Aquiles.