Pablo Carreño jugó a muy buen nivel en el Master 1.000 de París-Bercy frente al número 5 del mundo, el canadiense Milos Raonic, pero apenas un desliz en cada set le condenó a la derrota: 7-6 (5) y 6-4. Raonic respondió a su fama de bombardero, con uno de los servicios más potentes del circuito, y le bastó una rotura en el tie-break para llevarse el primer set. En el segundo se mantuvo la igualdad hasta que, en el quinto juego, el canadiense rompió el servicio de Carreño y mantuvo el suyo con mano de hierro para llevarse el partido y poner fin a la gran temporada del gijonés, durante la que ha logrado sus primeros títulos ATP.

El "cañonero" Raonic consiguió su tercera victoria del año sobre el asturiano, avalado por su poderoso servicio, con el que sumó 17 saques directos. El de Gijón también estuvo a buen nivel con esta arma, pero no tuvo ninguna opción al resto y su rival sí aprovechó su única oportunidad.