Jugadores y técnicos del Avilés analizaron ayer sobre el vídeo la derrota ante el Sporting B (3-1) y la pérdida del liderato, que pasa ahora al filial rojiblanco. La reunión del vestuario duró más de dos horas antes del entrenamiento en Miranda y todos dieron su opinión sobre lo sucedido en Mareo, sobre todo en los cinco minutos de la primera parte (del 30 al 35) que costaron el partido al encajar los tres goles.
El capitán Pantiga resumió así la reunión. "Estuvimos viendo los errores en los goles y lo que hay que mejorar para que deportivamente vaya todo mejor ya que el resto está de pena, como todo el mundo ve", señaló.
Hubo autocrítica porque "tiramos el partido en cinco minutos", reconoce Pantiga, y una firme determinación a centrarse en el aspecto deportivo porque, insistió en capitán, "es en lo único que nos podemos centrar porque todo lo demás está como está".
Los blanquiazules ya piensan en L´Entregu, el rival del domingo (12.00 horas) en el Suárez Puerta, pero sin perder de vista las cosas buenas que se hicieron en Mareo, sobre todo en la segunda parte, y la buena trayectoria del equipo. "No vamos a echarnos las manos a la cabeza por ser terceros a dos puntos del líder". Y añadió: "Es más, después de la situación que estamos pasando, creo que es de aplaudir que estemos ahí".
El técnico, Pablo Lago, cambió el 4-2-3-1 de las primeras jornadas para jugar con tres centrales, dos carrileros, dos medio centros, un media punta y dos delanteros, y el capitán entiende que el sistema no es problema. "Todos queremos jugar donde cada uno se siente mejor, pero al final hay que mirar por el colectivo y los números dicen que hemos perdidos tres partidos, que vamos terceros y que llegamos a la final de la Copa Federación".
Descontrol. Lago calificó la reunión como "una gran sesión" porque, señaló, "el entrenamiento ha estado dentro del vestuario más que fuera". El técnico achaca a "cinco minutos de descontrol" la pérdida del partido y del liderato. "La conclusión es que nos condenaron errores individuales y que, después de unos primeros veinte minutos tácticamente muy buenos y tras encajar el primer gol, no tuvimos paciencia y nos pudo el querer ir a por el partido porque nos hizo perder el sitio".
El técnico también asume que faltó "un poco de intensidad" en esos cinco minutos. "El problema es que lógicamente el partido se acaba ahí porque, aunque en la segunda parte hemos sido mejores, con 3-0 ya no tuvo mucha validez ese dominio".
También Lago habla de autocrítica. "Yo creo que eso es buenísimo para la progresión del equipo en el futuro porque hemos visto nuestros errores y hablamos de corregir las cosas en las que fallamos".
El técnico se reafirma en la sistema empleado. "Creo que fue acertado porque frenamos muy bien al Sporting B, que está acostumbrado a cerrar los partidos en los primeros veinte minutos". La pena, insistió, "fueron esos cinco minutos de descontrol y de no ser capaces de aguantar el partido para después jugar nuestras bazas cuando nos tocase".
La otra conclusión es que el equipo sigue siendo frágil atrás. "Con el primer gol perdimos el sitio y no pudimos mantener la misma idea de juego. Nos fuimos arriba y ahí el Sporting te mata porque tiene un potencial tremendo en ataque, como demuestran sus números", asume Lago.
La Liga es larga y en el Avilés sólo se piensa en seguir muy cerca de primer puesto para pelear hasta el final por el título. "Vamos paso a paso y al final veremos donde nos coloca la clasificación. De momento, nuestro siguiente objetivo es ganar a L´Entregu, que también será complicado", comenta el entrenador avilesino.
Lo más importante para lograr el objetivo, concluye Lago, es ser regulares y seguir mejorando. "Tenemos que intentar encontrar la solidez defensiva que de momento no ha aparecido y mantener el ataque. Se trata de dar continuidad a lo que funciona y dar soluciones donde tenemos más problemas".
