El Marino afronta una importante temporada. El club hizo un esfuerzo para contar con uno de los entrenadores de mayor prestigio, Adolfo Pulgar, y para confeccionar una plantilla competitiva a pesar de ver reducido su presupuesto en unos 40.000 euros por la pérdida de la explotación de las casetas de la playa, y el equipo está empezando a mostrar su potencial una vez superado el primer tercio del torneo liguero.

Los luanquinos ya se metieron cuartos en la 12.ª jornada y ahora son séptimos con 25 puntos, a dos del play-off (Oviedo B) y a siete del líder Sporting B. En casa, y ante los rivales directos, ganó al Avilés y al Oviedo B (1-0), empató con el Langreo (0-0) y perdió ante el Covadonga (1-2). Fuera empató en Tuilla (0-0) y perdió en Colunga (2-0).

Los números mejoran los del pasado año con las mismas trece jornadas disputadas. Los azulones eran entonces novenos con 18 puntos, a 7 del play-off (Oviedo B) y a 16 del líder, el Caudal. Y nunca habían estado entre los cuatro primeros.

La situación es buena y Pulgar hace un balance "bastante positivo", en cuanto a la trayectoria del equipo. "Empezamos a trabajar y a conocernos en la Copa porque somos un equipo nuevo, incluido el entrenador y parte del cuerpo técnico, y a todos nos cuesta adaptarnos a lo que hay que hacer". Y añade: "Fuimos progresando en muchas cosas. Es una pena que hayamos tropezado con el Covadonga porque la victoria nos habría afianzado arriba, pero creo que la línea es buena".

El técnico considera que los cimientos del éxito se basan en la firmeza defensiva del equipo, que logró mantener la portería a cero en ocho de los trece partidos, aunque tiene un "pero" para los dos últimos. "Encajamos cinco goles en tres días cuando llevábamos seis en doce partidos. Es un dato que nos preocupaba porque los equipos tienen que ser sólidos desde atrás", precisó.

Los luanquinos tuvieron que esperar a la cuarta jornada para cantar el primer gol ante el Ceares (1-3), pero el ataque nunca preocupó a Pulgar. "Sabía que llegarían porque tenemos jugadores que los hicieron toda la vida y creamos muchas ocasiones. No me preocupa nada".

La Liga está muy igualada y Pulgar destaca que "cuesta horrores" ganar, incluso a los equipos peor clasificados. "Todo el mundo puede ganar o perder contra cualquiera y cada semana puede cambiar la clasificación. Nosotros estamos ahora fuera de la liguilla, pero una victoria puede cambiar todo", señaló.

A la hora de hablar de favoritos, Pulgar se fija en el Sporting B. " Yo creo que dio un aviso ganando al Avilés y que va a ser un rival difícil, sobre todo en campos grandes, porque tienen la velocidad y el ritmo que dan la gente joven y escogida". A partir de ahí, explica, "hay un grupo de equipos con serias aspiraciones de y eso va a durar tiempo porque no creo que ninguno se descuelgue".

Y el Marino, concluye, tiene que ser uno de los elegidos "por historia y por lo que significa", porque a pesar de la rebaja del presupuesto "se hizo equipo para jugar la liguilla. El Marino tiene que estar entre los cuatro primeros. Hay que saber la exigencia y no renunciar a ella".