El encuentro del domingo entre el Caudal y el Racing de Santander (18 horas, Hermanos Antuña) significará el retorno de José María Lana a casa. El mierense forma parte del cuerpo técnico del conjunto cántabro como segundo entrenador. Sin embargo, Lana se enfrentará a su pasado, ya que fue preparador físico del conjunto caudalista en dos etapas, de 1999 a 2007 y entre 2010 y 2013, antes de embarcarse en el Racing de la mano del también extécnico caudalista Paco Fernández. Tras un paso por el Burgos la pasada temporada, Lana retornó al conjunto santanderino de la mano de su nuevo entrenador, Ángel Viadero.

- La palabra "especial" es la que define el encuentro ante el Caudal para usted.

- Tengo muchas ganas de acudir al partido en el Hermanos Antuña. Pasé muchos años en el Caudal. Lo primero que hice esta temporada, cuando se publicó el calendario, fue buscar la fecha de este encuentro.

-El hecho de regresar a casa siempre gusta.

- Vengo a Mieres y al Hermanos Antuña siempre que puedo. La última ocasión en la que acudí, como espectador, fue para presenciar el encuentro entre el Caudal y el Guijuelo de hace dos jornadas.

-¿Se le hace raro sentarse en el banquillo visitante?

- Solamente me tocó hacerlo en una ocasión, en la temporada 2013-14, cuando también acudí con el Racing de Santander. Es una sensación muy extraña enfrentarte a un equipo que siempre, excepto pasado mañana, quieres que gane.

- Nunca ha renegado de sus colores caudalistas.

- Soy aficionado del Caudal. Sigo siendo socio del club y siempre les deseo lo mejor. Eso sí, excepto el domingo.

-¿Ha dejado muchos amigos en Mieres?

- Guardo amistades tanto dentro del club, como en la plantilla y en la grada. Sin embargo, no he tenido ninguna conversación con ellos esta semana.

-¿Guarda buenos recuerdos de sus etapas en el Caudal?

- Inmejorables. El hecho de estar en casa es muy importante, pero es que el equipo era como una familia.

-¿Cuál fue su mejor momento?

- La promoción de ascenso a Segunda División, en la temporada 2012-13. Estuvimos cerca de lograr el ascenso tras eliminar al Cartagena. En el partido de ida contra el Hospitalet gozamos de ocasiones para llevar una renta más amplia, mientras que en la vuelta pudimos haber forzado el 2-1 que nos daba el pase. Incluso ya habíamos mirado al rival de la última ronda, el Jaén, un equipo al que nos habíamos enfrentado en Copa del Rey y al cual éramos conscientes de que podíamos ganar.

-¿Qué tal le van las cosas como segundo entrenador del Racing?

- Muy bien, muy contento. Es mi segunda etapa en el club. Acudimos a todos los campos con la obligación y la convicción de sacar los tres puntos.

-¿El objetivo es el ascenso?

-Nuestra meta es subir a Segunda División. No hay otra. Es lo que nos hemos marcado desde dentro del club.

-¿Cómo llega el Racing de Santander a Mieres?

-Acudimos con muchas bajas. Tenemos varios lesionados de larga duración, como Granero o César Díaz, y también alguna duda. Sin embargo, no queremos tener excusas. Llegamos al Hermanos Antuña con la obligación de ganar el partido.

-¿Qué opinión le merece el Caudal de esta temporada?

-Están realizando un papel digno en la categoría. No creo que tengan problemas para mantenerse en Segunda B de una manera holgada. Realizan un buen fútbol, con un gran trato de balón. Agrada verlos jugar, sobre todo porque muchos de ellos son futbolistas jóvenes que se encuentran ante su primera experiencia en Segunda B.

-El Hermanos Antuña es un escenario complicado para cualquier equipo.

-Es un estadio difícil, pero no solamente por el campo y su superficie, sino por el rival que vamos a tener enfrente. Solamente han caído en un encuentro como locales (ante el Lealtad de Villaviciosa) y lo hicieron de manera inmerecida, tras fallar incluso un penalti.

-Esta es una categoría en la que ningún rival otorga facilidades...

-En Segunda B ningún equipo te regala nada. Tienes que ser muy competitivo y estar mucho mejor que el rival si te quieres llevar los tres puntos.