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El fútbol base regatea las tarjetas negras

La Federación Asturiana aplazó hasta junio la propuesta regional de aplicar una cartulina ante conductas antideportivas del público

El fútbol base regatea las tarjetas negras

El deporte se ve cada vez más amenazado por comportamientos incívicos que desvirtúan los valores del juego. El ejemplo es la suspensión en Gijón de un partido de fútbol entre niños de cinco años, el pasado viernes, por culpa de las protestas de algunos padres. Estos casos han llevado a reforzar la educación deportiva desde la base. Clubes e instituciones han iniciado medidas en las que incluyen pautas para cuidar la actitud de los padres además de las dirigidas a los niños. En esa línea actuó esta misma temporada la Dirección General de Deportes del Principado de Asturias, con la aplicación de la tarjeta negra en las 32 actividades que se reúnen en los Juegos Deportivos, destinadas a escolares de entre 6 y 16 años.

La tarjeta negra complementa a la amarilla y la roja, reguladas por el reglamento de cada deporte, y tiene la particularidad de que sanciona situaciones de violencia verbal, menosprecio, amenazas o insultos, tanto por parte de jugadores o técnicos, como de los espectadores. La primera vez que sea mostrada por el árbitro servirá como aviso. Si es necesario mostrarla en una segunda ocasión, el árbitro procederá entonces a pitar el final del encuentro. El Principado invitó a la Federación Asturiana de Fútbol a aplicar en sus competiciones la tarjeta negra, sin que finalmente hubiera acuerdo. La Asturiana justificó a la Dirección General de Deportes que para darle el visto bueno habría que plantearlo, primero, en su asamblea general, que en ese momento, el pasado mes de agosto, ya se había producido. El interés por acogerse a este protocolo dejó aparcada la medida hasta junio. En Vizcaya, sin embargo, lleva años funcionando y esta temporada lo han puesto en marcha los árbitros de balonmano de Cataluña. En Asturias ya se han registrado dos casos en los que mostró una única tarjeta negra. Fue en un partido de voleibol y en uno de baloncesto. El fútbol, la actividad que reúne a un gran número de deportistas y aficionados de la región, regatea de momento las tarjetas negras.

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