Cuando el Real Oviedo informó este verano que Fernando Hierro se haría cargo de la nave, desde México se acompañó el anuncio de un mensaje de tranquilidad. Arturo Elías bendijo la llegada del nuevo técnico bajo la promesa de que el objetivo era regresar a Primera en un plazo de 4 años. Hablar de un periodo tan amplio de tiempo en una competición consumida por la impaciencia es una postura a contracorriente. Una extrañeza. Sólo ha habido que esperar 4 meses desde el inicio de la Liga para confirmar que la paciencia no es la virtud más desarrollada entre los dirigentes de Segunda. Consumidas 19 jornadas de Liga ya han caído nueve entrenadores. Desde 2008 no se veía una cifra tan elevada a estas alturas de Liga.
La rescisión de contrato de Vicente Moreno con el Nástic, ésta por decisión del entrenador, eleva a nueve el número de cambios e iguala la cifra que se lograba en la temporada 2008/2009 a estas alturas de competición. Antes que Moreno, fueron destituidos Esnaider (Getafe en la jornada 7.ª), Contra (Alcorcón, 9.ª), Milla (Zaragoza, 11.ª), Sandoval (Rayo Vallecano, 13.ª), Oltra (Córdoba, 16.ª), Terrazas (Mirandés, 16.ª), Fernando Vázquez (Mallorca, 17ª) y Salmerón (UCAM, 18.ª). En la 2008/2009 también se llevaban nueve cambios en los banquillos, con el Alicante como gran protagonista pues había despedido a cuatro técnicos: Carlos Granero, Asier Garitano, Nino Lema y Manolo Jiménez. También habían acabado su ciclo Salmerón (Alavés), José González (Córdoba), Vidal (Elche), Juan Manuel Rodríguez (Las Palmas) y Clemente (Murcia).
La pasada temporada también fue especialmente dura para los entrenadores, pero en el descanso invernal habían caído siete entrenadores: Sergi (Almería), Gaizka Garitano (Valladolid). Agné (Tenerife), Ferrer (Mallorca), Tevenet (Huesca), Popovic (Zaragoza) y Carrillo (Almería). Los cinco entrenadores destituidos en las campañas 2010-11, 11-2, 13-14 y 14-15 y los cuatro de la 2012-13 tampoco se acercan a los números del presente curso.
En la mayoría de los casos el relevo ha servido para que los equipos mejorasen su rendimiento. El ejemplo más beneficioso es el del Getafe. Hundido en la tabla con Esnaider a los mandos, penúltimo, decidió activar el relevo a las siete jornadas y contrató a Bordalás. Ahora, el equipo es tercero y se presenta como uno de los aspirantes más fiables. También tienen un ligero repunte el Alcorcón con Velázquez, el Zaragoza con Agné, el Córdoba con Carrión y el Mirandés con Barragán. Baraja en el Rayo mantiene similar trayectoria y Olaizola en el Mallorca ha empeorado los números. Aún buscan su estreno Francisco en el UCAM y Juan Merino, confirmado hace sólo unas semanas como nuevo técnico del Nástic.
