El Unión Financiera se ha impuesto al Clavijo de Logroño y recupera el liderato de la LEB Oro que perdió el miércoles pasado con la derrota (70-74) ante Ourense, la primera de la temporada en Pumarín. Los de Carles Marco se han recuperado del traspié con una victoria a domicilio en un encuentro muy disputado.

Las cosas no comenzaban bien para el conjunto asturiano. Uno de sus jugadores más determinantes en ataque, el sueco Johan Löfberg, se caía de la convocatoria por enfermedad. Una baja notable que pasó factura en la anotación. Pero, como le suele ocurrir al Unión Financiera esta temporada, cuando hay alguien lesionado o que no está en su mejor momento aparece un compañero que le suple con creces. En el partido ante el Clavijo ha sido Miquel Salvó el que ha tenido su día más dulce. El catalán fue imparable y acabó el encuentro con 22 puntos, siendo el máximo anotador del encuentro y el jugador más valorado (23).

Un partido que estuvo ajustado todo el tiempo y en el que el Unión Financiera supo apretar en defensa en el último cuarto para llevarse el triunfo. No sin susto. Los carbayones fallaron su último ataque y aún concedieron a Ruiz de Galarreta un último tiro que les podía haber costado caro. No fue así y la victoria se va para Oviedo.

El equipo de Carles Marco vuelve a jugar en Pumarín el sábado, a las 20.15 horas, frente el Burgos. Un equipo que llegaba líder a estar jornada y al que han superado en la clasificación después de que perdieran 83-92 ante el Breogán. El Burgos es además el equipo al que se medirán el viernes 27 de este mes en la final de la Copa Princesa, que también se disputará en el polideportivo de Pumarín y en la que se enfrentan el primer y el segundo clasificado al término de la primera vuelta.

Una buena ocasión para disfrutar de una nueva fiesta del baloncesto en la pista ovetense, que todo hace indicar que volverá a registrar un lleno para ver al líder de la LEB Oro.