"Tengo ganas de volver a Miramar, es una pena por estar luchando donde estamos nosotros, pero el partido es muy especial para mí", sentenció ayer el guardameta del Urraca, Dani Laviana, que llegó al conjunto de Posada desde el Marino el pasado verano y ambos equipos se enfrentan mañana en el campo luanquín (16.30 horas). "Tuve que buscar una alternativa porque por trabajo no podía entrenar por las mañanas, pero, al margen de lo deportivo, estoy muy a gusto en el Urraca, el club nos trata muy bien, no pueden hacer por nosotros más de lo que hacen", señaló el jugador.

Dani Laviana vuelve a la portería de Miramar con muchos minutos a sus espaldas. El portero se ha consolidado como titular en su equipo y, lo más probable. "Si el entrenador mantiene su confianza, trataré de dejar la portería a cero. En el partido ante el Marino tenemos que intentar sacar algo, al menos un punto, porque sabemos que es muy complicado ganar. En la situación en la que estamos tenemos que rascar de donde sea, aunque sea de un campo como Miramar", explicó.

Y es que el Urraca es ahora colista, a cinco puntos de los puestos de salvación. "Venimos de una racha de jugar con equipos de la zona alta y nos quedan por delante casi todos los partidos de nuestras liga", añadió el portero. Pero, con todo, afirma que el Marino no se debería confiar: "Llevamos varios partidos pelando hasta el final, pero se nos fueron por goles en los últimos minutos. Estamos plantando cara y queremos dar un paso más".

El jugador afirmó que tiene ganas de ver a los que fueron sus compañeros, en especial a Davo, con el que compartió portería en las dos últimas campañas, en Avilés y Luanco.