La Liga de Campeones enfocó hace semanas a un equipo deslumbrante con el que nadie contaba en la zona noble continental: el Mónaco. El asombro general no fue tanto por su éxito ante el Manchester City, que también, sino por su imponente despliegue: un grupo joven, enérgico y deshinibido, de tremendo poderío físico, hábil en el manejo de la pelota y resolutivo en ataque. Un conjunto repleto de futbolistas que sonaban poco o nada hasta que las cámaras de la Champions le situaron en el centro de la escena. Algunos de ellos amenazan a la España invicta de Lopetegui.
El Mónaco lidera la liga francesa por delante del PSG y aporta a Francia un grupo de cotizados jugadores que representan a la nueva generación de futbolistas galos que hacen de la selección del gallo, subcampeona de Europa el año pasado, un combinado con enorme proyección, quien sabe si candidato a ganar al próximo mundial en Rusia de 2018.
La Francia que hoy medirá a España aglutina a una nueva hornada de futbolistas jóvenes, potentes y habilidosos, muchos de origen africano; un grupo que empieza en Griezmann (26 años) y acaba en el mediático Mbappé, delantero con pinta estupenda al que ya han comparado con Henry y que el sábado, con 18 años y 55 días, se convirtió en el segundo jugador más joven de la historia de Francia en debutar con la absoluta. Mbappé suena a millonario culebrón del verano porque ya es pretendido por grandes de Europa como el Madrid o el United, clubes que lucharon en su día por contratar a Pogba (24 años), otro referente, consagrado ya, de una selección que tiene mucho músculo en la segunda fila, en esos nombres que con partidos como el de hoy contra España empiezan a sonar.
Aquí aparece Ousmane Dembelé (20 años), un extremo rapidísimo de origen senegalés que ya deslumbra con el Borussia Dortmund, atento el verano pasado para ficharlo del Stade de Rennes. Asoma Mendy (23 años), defensa también de origen senegalés que destaca en el Mónaco, que ha aportado a la lista "bleu" hasta cinco futbolistas: Mbappé y Mendy, los centrocampistas Bakayoko (22 años, origen marfileño) o Lemar (21 años, origen guineano) y el lateral Sidibe (24 años, origen senegalés) ausente hoy por lesión y que está en la órbita del Barcelona.
Más allá del Mónaco, en esta nueva generación que hoy moldeaa a Francia, la mayoría nacidos del año 1993 en adelante, están también Umtiti (23 años) y Varane (23), con un gran rendimiento en el Barcelona y Madrid, respectivamente, o Kimpembe (21 años), central del PSG. También Laporte (22 años), central del Athletic convocado a última hora por la lesión de Rami.
En la portería aparece Areola (24 años), meta del PSG que estuvo en el Villarreal. En el centro del campo, además de los mediáticos Matuidi o Pogba, asoma Rabiot (21 años), que que se presentó en sociedad con un gran partido ante el Barcça en el 4-0 de París. Y arriba destacan, además de Griezman, Gameiro o Giroud, los citados Mbappé o Dembelé, dos promesas muy cotizadas.
