España cuenta desde ayer con una medalla más de oro en los Europeos en sala de atletismo, la conseguida por la Nuria Fernández en los 1.500 metros de ¡Helsinki 2012! La madrileña terminó hace cinco años en cuarta posición, logrando la conocida como medalla de chocolate, pero la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) ha ido sancionado a las tres primeras por dopaje hasta quedar ella en lo más alto del podio.

A sus 40 años, casada y con tres hijas, Nuria Fernández creía haber alcanzado ya el máximo de su carrera con el oro en los 1.500 del Europeo disputado en 2010 en Barcelona y la plata lograda al año siguiente en París en 2011. Esta temporada logró la proeza de clasificarse para el Europeo de Belgrado en los 3.000 metros, pero cuando menos lo esperaba la ha llegado un nuevo oro. La historia es la siguiente.

Europeo en sala de 2012. Helsinki. Final del 1.500. Nuria Fernández finaliza cuarta con 4:08.80 por detrás de las turcas Aski Cakir (4:05.31) y Gamze Bulut (4:06.64) y de la ucraniava Anna Mischenko (4:07.74). Sólo un año después la Federación turca inhabilita a Cakir por anormalidades en su pasaporte biológico, sanción que la IAAF ratifica en marzo de 2015. Nuria ya es bronce. Ese mismo 2015, en agosto, la IAAF suspende por la misma razón y retira los resultados de los últimos años de Mischenko. Nuria sube otro escalón en el podio. Plata. Y ayer la Federación Internacional confirmaba la inhabilitación de Bulut también por irregularidades en su pasaporte biológico y la anulación de todos sus resultados desde julio de 2011. Oro.

"Tengo 40 años y cada día me cuesta más entrenar, pero esta noticia me va a dar nuevos ánimos. Quiero despedirme en el Europeo de Berlín del próximo año y voy a luchar más que nunca por llegar", señaló ayer la madrileña tras conocer su nuevo título continental.