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El éxodo de futbolistas

Decenas de jugadores de la comarca se irán un año más a los grandes de Asturias debilitando gravemente a los clubes locales

Sergio Álvarez. J. J.

Vuelve la sangría al fútbol base de la comarca. Los clubes ya están trabajando sobre la formación de las plantillas cara a la próxima temporada, pero en muchas ocasiones se encuentran con problemas para renovar a los futbolistas porque los ojeadores de los grandes ya los tienen apalabrados. Y es que cada verano se van decenas de jugadores que despuntan al Sporting y al Oviedo, pero también al Roces, Veriña e incluso al Llano 2000 gijonés y al Covadonga ovetense.

Esta migración que tanto debilita a los clubes locales es habitual desde hace muchos años, pero se agravó en la última veintena porque no sólo afecta a juveniles de último año, como antaño, que muchas veces habían debutado con el primer equipo del Avilés, ahora se van incluso prebenjamines de ocho años y a partir de ahí hay benjamines y alevines de la comarca prácticamente en los todos los equipos asturianos.

Sólo en las categorías mayores, (infantiles, cadetes y juveniles), más de medio centenar de futbolistas de la comarca están repartidos esta temporada entre equipos de Oviedo y Gijón.

El club más "esquilmado" es el Avilés, que este año tuvo problemas para completar algunos equipos y tiene jugadores de todas las categorías en los clubes asturianos más potentes. Y eso que el club blanquiazul siempre contó con equipos en la máxima categoría, aunque el abandono de los últimos años se notó en la cantera y en la actualidad sólo están en la máxima categoría el División de Honor y el benjamín A. El cadete y el infantil pelean este año por volver a la élite.

Otros equipos, como el Navarro tiene a Álex García en el Sporting de Liga Nacional (aunque juega cedido en el Quirinal); el luanquín Félix Sanz juega con el Roces de División de Honor; y el delantero Fernando (Los Campos) está con el Roces cadete.

Un caso aparte el Quirinal, que firmó un convenio de colaboración con el Oviedo por el que el club azulón tiene prioridad ante cualquier jugador que el interese. Y los azules le sacan provecho porque tienen tres exjugadores del Quirinal en el equipo de Liga Nacional: Iván Serrano, José Luis Guerra y Carlos Nuñez, además de los cadetes Sergio Ordóñez, que pasó también por el Roces, y Luismi Riopedre; y los infantiles Gabriel Rebanillo, el portero Marco (de gran proyección), Kike Meaurio, Alejandro Muñiz, y Dani Lara.

Muchos son los jugadores que se van cada año en el ansia de los grandes de controlar a todos los que pueden destacar en cualquier rincón de Asturias, pero pocos los que llegan a triunfar. De hecho, la mayoría vuelven al cabo de unos años un tanto desencantados y con pocas ganas de seguir jugando al fútbol.

Un ejemplo de que jugar en Mareo o en El Requexón no es una garantía de triunfar es que esta temporada sólo figuran dos jugadores en las primeras plantillas del Sporting (Sergio Álvarez) y del Oviedo (Esteban). Sergio Álvarez (25 años) es un ejemplo del futbolista que empezó en el Avilés y se fue en infantiles a Mareo. Sergio debutó con 17 años con el primer equipo rojiblanco siendo titular en Primera contra el Racing de Santander.

El portero Esteban pasó por las categorías inferiores del Navarro y el Avilés, con el que jugó 40 partidos en Segunda B entre 1993-1995, para pasar al Oviedo B. Y con 22 años debutó en Primera con el Oviedo frente a la Real Sociedad.

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