El Barcelona, con la lección aprendida del 4-0 que sufrió en febrero en París y que le obligó a protagonizar una épica remontada en el Camp Nou (6-1), visita hoy al Juventus con el objetivo de no repetir en Turín los errores de París. Ambos equipos reeditarán la final de 2015, que los azulgrana ganaron 2-1.

El equipo barcelonista no quiere malgastar la vida extra en la Liga de Campeones en un momento en que la Liga está cada vez más lejos. El objetivo, por tanto, es llevar la eliminatoria europea de cuartos al Camp Nou con un resultado en la ida que no le obligue a una nueva gesta como la del PSG. "Saldremos a buscar la victoria desde el inicio", confirmó ayer Luis Enrique.

Los azulgrana saldrán sin Sergio Busquets, sancionado, una ausencia que condicionará el once culé. La incógnita es saber si Luis Enrique, que se ha llevado a toda la plantilla a Turín alineará un 4-3-3 o recuperará el 3-4-3 que tan buenos resultados le ha dado las últimas semanas. "Busquets es vital para nosotros, pero estamos más que capacitados para sustituirle El dibujo probablemente lo condicione el papel de Javier Mascherano. Si el argentino es el sustituto de Busquets y actúa como pivote defensivo guardándoles la espaldas a Rakitic e Iniesta, que regresa al once titular, Luis Enrique mantendría el 4-3-3. Si finalmente es el discutido André Gomes el que juega de pivote, Mascherano, Piqué y Umtiti formarían en el eje de la zaga, en un 3-4-3 donde Jordi Alba probablemente sería el sacrificado en el once titular. En cualquiera de los dos sistemas, Leo Messi, Luis Suárez y Neymar da Silva formarán el tridente ofensivo de los azulgranas.

El Juventus, mientras, recibe al Barça en un buen momento. Lleva 21 partidos europeos sin perder en su estadio, números que el propio Luis Enrique calificó de "espectaculares". Jugarán Dybala e Higuaín, las dos principales amenazas ofensivas y es posible que sea suplente el exbarcelonista Dani Alves, reemplazado por Lichtsteiner.