El Marino recibe el próximo domingo (17.00 horas) al Praviano en Miramar con muchas bajas. Geni, con molestias en el adductor, y Álvaro Pozo, con desgarro en el tendón del adductor, no entrenaron ayer con el grupo en Miramar. Boris, que sufre una pequeña rotura de fibras en el isquiotibial izquierdo, y Pablo Suárez, con una microrrotura en un gemelo, trabajaron con precaución.

Pablo Hernández está pendiente de una revisión médica del hombro izquierdo, del que se operó en enero pasado por una luxación, porque se le volvió a salir dos veces al caer mal durante el partido del pasado domingo en Llanes. El centrocampista azulón podría tener que volver a pasar por el quirófano.

El equipo luanquín vuelve a entrenar esta mañana (10.30 horas) en Miramar y descansará mañana viernes. La última sesión será el sábado (10.30 horas) en Balbín.