El campanu del río Narcea se hizo esperar. Victorino Álvarez Caballero, de 53 años y vecino de Olloniego (Oviedo), echó a tierra el ejemplar ayer a las cinco y media de la tarde en el coto Juan Castaño. El primer salmón con muerte de este río pesó 4,950 kilos y midió 74 centímetros. "Ya nos íbamos", indicó ayer este ribereño con ocho años de experiencia.
Victorino Álvarez estaba acompañado de su cuñado, Maximino Gutiérrez, cuando picó el salmón. "Fue con el último lance, lo tenía casi a mis pies", señaló el ribereño, que utilizó como señuelo cebo natural. La pareja de pescadores vio un ejemplar por la mañana en el coto que tenían reservado y decidió intentar la pesca por la tarde. Empezaron la jornada a las ocho de la mañana.
El ejemplar, que es el primer campanu que pesca este ribereño de Olloniego, se disfrutará en una comida familiar.
Este fue el único salmón capturado ayer en los ríos salmoneros asturianos. Desde los cuatro que se echaron a tierra el pasado domingo, cuando empezó la temporada, el resto de los tres días de pesca fueron saliendo de uno en uno. Faltan ahora los campanos del Esva y Cares.
