Pablo Carreño afronta esta semana la disputa del trofeo Conde de Godó en Barcelona, un torneo que le hace especial ilusión jugar ya que en esa ciudad acabó su formación y se hizo profesional. El asturiano perdió un puesto en el ranking ATP y ahora es el 20, a pasar de su buena actuación en Montecarlo, donde superó dos rondas y estuvo a punto de eliminar a Djokovic.
En Barcelona, Carreño sale como cabeza de serie número siete -lo que le sirvió para librase de la primera ronda- y se enfrentará hoy en segunda ronda a Andreas Seppi, número 74 del mundo.
El Conde de Godó, un Máster 500, cuenta este año con una excelente participación, entre ellos el actual número 1 del ranking Andy Murray, Rafa Nadal, Dominic Thiem, David Goffin, Alexander Zverev, Richard Gasquet, David Ferrer o Pablo Cuevas. Nisikori, que también se había inscrito, al final ha renunciado a participar debido a una lesión.
Pablo Carreño, además, se apuntó a la competición de dobles y lo hizo formando pareja con su entrenador, Juan Carlos Ferrero, que a sus 37 años, y tras cinco retirado, aceptó una invitación para jugar en esta edición formando pareja con el gijonés. Su aventura duró poco porque fueron eliminados en primera ronda por el polaco Marcin Matkowski y el canadiense Daniel Nestor por 6-2 y 5-7 y 10-7.
