El Real Avilés CF no tiene aún noticias de la solicitud presentada en el juzgado a finales de la pasada semana por la vía de urgencia por Alfonso Tomás, abogado de la propiedad (José María Tejero), para que un administrador judicial se haga cargo de la gestión apartando cautelarmente a los actuales gestores de Real Avilés Gestión Deportiva (con Álvaro López a la cabeza) mientras se resuelve la disolución del contrato por incumplimiento.

Hasta el momento se desconoce incluso el juzgado que tramitará el asunto, pero el abogado de la entidad ya tiene lista la demanda de rescisión por incumplimiento del contrato que tiene previsto presentar de inmediato. "Queremos ser respetuosos porque no se resolvió la medida cautelar que solicitamos por urgencia, pero no vamos a agotar los 20 días hábiles que tenemos para presentar la demanda de rescisión", explicó el letrado.

Una demanda, adelantó, que irá acompañada de la solicitud por vía ordinaria de las mismas medidas cautelares para solicitar una administrador judicial hasta que se resuelva la demanda de rescisión de contrato. "Se pide cautelar para evitar que puedan hacer un daño al club", explica Alfonso Tomás.

En el fondo de la demanda están los problemas con los pagos de la escuela porque "se incumplieron un serie de pactos recogidos como obligatorios en el contrato", dice el abogado, y su resolución podría ser rápida si se cumplen los plazos legales, aunque dependerá de la carga de trabajo del juzgado. "Si el juez aprueba la medida cautelar por cualquiera de las vías (ordinaria o urgente) nos da igual el tiempo que dure el proceso porque la gestión estaría en manos del administrador judicial y supervisada por el juzgado", dice Tomás.

Alfonso Tomás asegura que el pago de las cantidades supuestamente adeudadas por IQ finanzas no interrumpiría el proceso judicial porque, "hemos perdido la confianza en su gestión y seguiremos adelante con la rescisión del contrato".

Problema en el vestuario. Mientras la denuncia judicial sigue su curso, el propietario del Avilés, José María Tejero, exige a los responsables de la gestión que solucionen de forma inmediata el problema que, en su opinión, existe entre el vestuario y el cuerpo técnico. "Es algo que se vio claramente después del partido contra el Tuilla y el último domingo frente al Condal. Y eso hay que remediarlo porque con ese problema no se puede afrontar la promoción y no hay ninguna garantía de seguir adelante", señaló Tejero. Y concluyó: "Los jugadores transmiten su malestar y eso es muy malo para afrontar el reto del ascenso como queremos".