El Siero Deportivo Balonmano vuelve a acariciar la posibilidad de subir a la División de Honor de Plata, algo que tratará de lograr este fin de semana en la fase de ascenso que se disputa en la Pola. El club pudo haber subido ya en dos ocasiones, pero hubo de renunciar en ambas por la falta de disponibilidad económica, ya que lo que no quiere es renunciar a los equipos base.

Si el prespuesto que ahora tienen es de entre 25.000 y 30.000 euros, necesitarían elevarlo a unos 60.000 euros por los gastos en viajes, arbitrajes o fichas, entre otros, que conlleva estar en la División de Honor de Plata. "Vamos a ver hasta dónde se puede llegar", apunta el presidente del club, Alfonso García. Agrega que "de conseguirlo es un salto cualitativo grande a todos los niveles, porque se duplica el presupuesto". Tiene claro que "si se sube, vamos a intentar mantener un equipo arriba" y buscarán "todas las ayudas posibles". Los rivales de la fase son el Indupime Basauri (vasco), el Atlético Guardés (gallego) y el BM Carabanchel (madrileño) son rivales fuertes. El Guardés será el primer rival de las sierenses, el viernes a las 20 horas; el Basauri se cruzará con ellas el sábado a la misma hora y las madrileñas serán las rivales del domingo, a partir de las 12.30 horas.

Las jugadoras Odile Alonso, Paula Solís y Sara Díaz se confiesan "nerviosas, pero con ilusión" después de un mes y medio de "trabajo muy intenso".