Sigue la espera en el Avilés. Julio Schleich, consejero delegado del Real Avilés CF y Dennis Colmenares, directora financiera de IQ Finanzas (grupo inversor mexicano que controla el club) volvieron a encontrarse ayer en busca de una salida consensuada a la actual situación de paralización del club, bloqueado federativamente por los 32.000 euros en pagarés que adeuda a la plantilla de la temporada 2015-2016 y que impide al club ralizar fichajes. Ambas partes plantearon opciones sobre la mesa, entre ellas la propuesta de venta realizada por José María Tejero, dueño del club, y que rondaría los 2,8 millones de euros. Álvaro López, gestor mexicano, está estudiando la oferta. "No puedo referirme a este tema por consejo de mi abogado, pero si hay una posibilidad sí me causa interés y lo estudiaremos", dijo ayer a este periódico.

En la reunión de ayer, el consejero delegado del Avilés propuso una posible forma de pago si finalmente el empresario mexicano acepta la oferta de venta, aunque dejando abierta la posibilidad de que se estudien otras. La de Tejero es una propuesta similar a la que López presentó el pasado mes de marzo y que, según explicó el empresario mexicano en Facebook, pasa por hacerse cargo de las deudas más dos millones a pagar en cuatro años.

Julio Schleich y Dennis Colmenares volverán a hablar esta mañana, una vez que Colmenares ponga al día a López de todo lo tratado, y es posible que haya avances porque las dos partes consideran que urge una salida.

Lo cierto es que las conversaciones son ahora más fluidas entre las dos partes, las opciones están expuestas con claridad sobre la mesa, y parece que en horas se puede concretar una salida consensuada que hace meses parecía imposible.

Lo que más urge en solucionar el problema de los pagarés pendientes para desbloquear la situación con la Federación y poder tramitar las fichas de la próxima temporada. Ambas partes se pasan la pelota y la salida pasa por la venta del club o por hacer frente al pago de forma consensuada.

A última hora de la tarde de ayer parecía que la venta ganaba enteros y se barajaban sólo dos alternativas: que el gestor acepte la propuesta de Tejero y se haga cargo de la propiedad o que renuncie a continuar en el club.