Todo empezó en el Condal, en Noreña. Álvaro Fidalgo, de 20 años, natural de Hevia (Siero), dio allí sus primeros pasos en el fútbol. Su talento le llevó a pasar primero por la cantera del Oviedo y después por la del Sporting, hasta que el Madrid se fijó en él y todo cambió. Al club blanco se unió siendo cadete de segundo año. Ahora, ha renovado hasta el 2020.
La semana pasada acabó sus vacaciones y ya se ha incorporado al Castilla, el filial del Madrid, donde esta temporada jugará a las órdenes de unos de los entrenadores que más ha confiado en él, Santiago Solari, que ya le dirigió en el juvenil A del Madrid. Lo hace después de pasar un año cedido en el Rayo Majadahonda, en Segunda B. "Fue un buen año, jugué más de 30 partidos, llegamos al play-off tras quedar cuartos en la Liga en un grupo muy duro. Una experiencia muy buena", valoraba el mediapunta poco antes de dejar Asturias, donde tiene a su novia y a su familia.
En la misma categoría, en Segunda B, buscará hacerse un hueco en el filial blanco. Aunque no quiere hablar de objetivos, sí reconoce que tratándose del Madrid "siempre se busca ganar". Para Solari solo tiene buenas palabras: "El tiempo que estuve con él disfruté mucho y teníamos muy buena relación". También conoce de cerca a Zinedine Zidane, técnico del primer equipo blanco, que le dirigió en algunos entrenamientos en el Castilla.
"Coincidí con él algunos entrenamientos y lo que más me sorprendió fue su humildad. Es un persona trabajadora, que, siendo la persona que es y el jugador que fue, que lo fue todo, a pesar de todo eso, es alguien muy normal, muy humilde", insiste el futbolista blanco. Conociendo a Zidane, está seguro de que una de las claves del éxito del Madrid está en el buen ambiente que crea el técnico francés: "Es una buena persona, que sabe gestionar los grupos, y eso se nota en que al Madrid se le ve que es como una familia. Un grupo muy unido".
Una familia a la que algún día le gustaría pertenecer: "El sueño de todos los que estamos ahí es debutar con el primer equipo, pero a corto plazo solo pienso en seguir creciendo y en algún momento conseguir ser jugador profesional". En su día le compararon con Iniesta por su estilo de juego, algo que considera "un honor". Le gusta jugar de mediapunta y su especialidad es poner buenos balones a los delanteros.
