Pablo Carreño vuelve mañana a las pistas tras cinco semanas de parón debido a la lesión sufrida en el partido de cuartos de final de Roland Garros ante Rafa Nadal.

Lo hará en el torneo de Bastad (Suecia), un ATP 250, en el que el asturiano parte como cabeza de serie número 1. Y lo hace además en la mejor posición del ranking de toda su carrera, ya que a pesar de estar lesionado y sin competir ha subido un puesto y es el 16.º del mundo.

El peculiar sistema de puntuación de la ATP hizo posible esto que parece en si mismo un contrasentido. La explicación es que Carreño no defendía puntos en Wimbledon y por tanto no los podía perder lo que si le sucedió a Lucas Poulle, que inició Wimbledon en el puesto 14 pero cayó eliminado en una ronda anterior a la del año 2016 lo que le hace perder puntos y caer dos puestos, de lo que se aprovecharon Pablo Carreño y el estadounidense Jack Stock.

Carreño lleva dos semanas entrenando tras estar 21 días parado y en Bastad se podrá comprobar si mantiene el nivel de juego que estaba ofreciendo en París. Su rival de mañana saldrá del enfrentamiento de hoy entre Andrey Kuznetsov y Jan Lennard Struff. Albert Ramos y Pablo Cuevas son dos de los rivales más fuertes del torneo.