El porteo de La Boticaria resultó un elemento fundamental en el triunfo final del Descenso Internacional del Sella. Una acción que fue vital en el desarrollo de la prueba, y en la que Bouzán y Fernández Fiuza demostraron una vez más su superioridad. Sin embargo, la decisión tomada por los jueces no sentó bien a los octocampeones de la prueba.

Álvaro Fernández Fiuza señaló que "la decisión de portear en La Boticaria se tomó tarde y no pudimos prepararlo bien" y añadió que "aún con ella conseguimos ganar". Por su parte, Walter Bouzán apuntó que "se puede portear, pero se debe acondicionar y señalizar la zona; era muy peligroso y no había una ambulancia para evacuar". Es por ello por lo que el palista riosellano calificó esta decisión de los jueces como "desacertada". La pareja aseguró que había participantes que hacía semanas que sabían que se portearía en La Boticaria, pero ellos no.

La determinación de portear se tomó en décimas de segundo. "La gente va escogiendo en función de la carrera y de su estrategia", apuntó Fiuza. El gallego destaca que "en un mes se pueden hacer muchos ensayos e incluso medirlo con un GPS, sabiéndolo esta semana, es complicado seleccionar la ruta más rápida e influye mucho la intuición". En ese aspecto, Fiuza alabó la capacidad de su compañero, "ya que conoce bien la Ría y eso es importante".

Para Bouzán, "La Boticaria ha hecho que este año haya existido mucha más incertidumbre en la prueba". El riosellano destacó que "no nos vimos ganadores hasta el final". Álvaro Fernández Fiuza destacó que "el Sella es una prueba increíble y el porteo en La Boticaria lo ha hecho más increíble todavía". Sobre su octavo triunfo consecutivo, Walter Bouzán destacó que "es algo inimaginable haber logrado ocho seguidos". Para Álvaro Fernández Fiuza, "la gente piensa que cada año es más fácil, pero no es así, la presión es mayor". El gallego apuntó que "en 2010, cuando logramos el primero, éramos jóvenes, pero ahora estamos envejeciendo y los rivales vienen empujando fuerte por detrás. Un año más, y a pesar de La Boticaria, Bouzán y Fiuza siguen aumentando su leyenda.