Al igual que sucedió la temporada pasada con Eduardo Hernández Sonseca, el Unión Financiera Baloncesto Oviedo ha incorporado grandes dosis de calidad y experiencia en la pintura para la próxima campaña con el fichaje de Óliver Arteaga. El jugador canario, de 2,09 metros de estatura y 34 años, ha sido uno de los pívots más determinantes de la LEB Oro en los últimos años.

Formado en la cantera del Valencia, fue miembro de la plantilla ACB del conjunto levantino y después jugó en la máxima categoría en el CAI Zaragoza (temporada 2008-2009) y en La Bruixa d´Or Manresa (entre 2012 y 2014). Una vez en la segunda categoría del baloncesto español, Arteaga se ha convertido en un clásico de la misma, formando parte de Basket Zaragoza, Tenerife Baloncesto, Guipuzkoa Basket, Palencia, Breogán, Menorca y Basket Navarra, antes de recalar la última temporada en el Melilla.

Los números del jugador en el conjunto africano son de destacar: en sus 25 minutos en pista promedió 13,5 puntos, 6,5 rebotes y 17,7 puntos de valoración, con un excelente porcentaje en los tiros de dos, un 67%, y un decente 66% en los lanzamientos libres. Se trata de un cinco puro, sin el lanzamiento exterior y la calidad en el pase de Hernández Sonseca pero con un mayor dominio del bloqueo y continuación y más movilidad.

Para el director general del Oviedo, Héctor Galán, la llegada de Arteaga "es un refuerzo muy importante para el equipo, un pívot determinante las últimas temporadas en la liga. Esperamos que siga aportando su calidad y experiencia y nos ayude a formar un equipo competitivo".

Arteaga será, además, el contrapunto en veteranía a la inexperiencia de la que aún pecan los dos refuerzos que vendrán cedidos desde el Unicaja de Málaga, el ala-pívot bosnio Kenan Karahodzic y el alero congoleño Romaric Belemene.

Con estos tres nuevos jugadores, la plantilla del Unión Financiera alcanza los siete efectivos: los bases Cárdenas y Santana, el escolta Víctor Pérez, el alero Belemene, el ala-pívot Karahodzic y los pívots Barro y Arteaga. La intención del cuerpo técnico es tener, en principio, diez jugadores, con lo que restarían tres refuerzos en las posiciones de dos, tres y cuatro. Para este último puesto el club negocia la renovación de Paul Jesperson, que ofreció un gran rendimiento la temporada pasada y que podría hacer pareja con cualquiera de los interiores, incluido el propio Karahodzic. Tampoco se descarta la continuidad de otros jugadores de la pasada plantilla, en función de las necesidades que vea el cuerpo técnico. El club aún tiene disponibles las dos plazas de extracomunitario.