El titular del Juzgado número 7 de Avilés, Joaquín Colubi, dejó pendiente de resolución la vista por la demanda de medidas cautelares presentadas por Real Avilés GD (la empresa que adquirió Álvaro López en diciembre para gestionar el club) contra la decisión del consejo de administración Real Avilés CF (presidido por José María Tejero) de rescindir en abril el contrato de gestión por "incumplimientos" del mismo, y recuperar la administración a principios de agosto.

Tejero representó a Real Avilés CF, mientras que no hubo ningún representante de Real Avilés GD.

Las medidas consisten en que el club gestione las fichas de los jugadores de Real Avilés GD, que anule las de los futbolistas de Real Avilés CF (que están compitiendo ahora) y que se les permita el acceso al Suárez Puerta.

El caso lo sigue la titular del Juzgado número 3, Virginia Fernández, que está de vacaciones y que el pasado día 1 rechazó la petición de Real Avilés GD de tomar estas medidas de forma urgente.

El abogado de la demandante, Santiago Nebot, justificó la tardanza de Real Avilés GD en tomar medidas judiciales tras negarse el club a tramitar sus licencias "porque hasta finales de agosto no empieza la Liga y se esperó para intentar solucionar el asunto de forma amistosa".

Nebot anunció cambios en las medidas cautelares en la tramitación de las licencias porque, explicó, "hay varios futbolistas que han suscrito contrato con otros clubes (Cristian Pérez con el Parla y Javier Serrano por el Móstoles) y otros a los que se dio libertad para salir una vez que la jueza rechazó las medidas cautelares urgentes para que Real Avilés GD retomara el control del club". La petición en quedó en que se tramiten las fichas "de los futbolistas que contrate Real Avilés GD".

El letrado justificó la "apariencia de buen derecho" en la existencia, explicó, "de un contrato vigente porque la demandada no aportó ninguna prueba de lo contrario aunque incumple en sus obligaciones causando graves perjuicios". Respecto al peligro por la mora procesal, Nebot aseguró que la no admisión de las medidas cautelares impediría la ejecución del contrato, "que conlleva intereses económicos importantes como la posible venta del club y el traspaso de jugadores", porque, señaló, "quedan tres años y sería imposible ascender a Primera División o al menos a Segunda porque habría que quitar esta temporada que sería gestionada por Real Avilés CF en espera de la resolución de la demanda de rescisión y no habría tiempo, y la inversión de más de medio millón de euros de mi representada no serviría para nada".

Sobre la falta de presupuesto y de un aval, explicó que "se les ha manifestado que iba a ser similar al de este año" y que "se les ha ofrecido afianzarlo, pero no han querido admitirlo a pesar de que se ha demostrado que la empresa es cumplidora". Tampoco admitió Nebot que la filtración a la prensa del contrato de gestión de diciembre haya sido de su parte.

José Manuel Álvarez, el letrado de Real Avilés CF, pidió el rechazo de la demanda al no cumplirse las medidas que justifican unas cautelares porque "no hay mora procesal, caución suficiente ni apariencia de buen derecho". Y se ratificó en los incumplimientos del contrato de diciembre, sobre todo por no pagar los gastos de la escuela desde enero.

Álvarez empezó con el uso del campo, recordó que el Real Avilés CF ostenta la concesión municipal "sin que el contrato de gestión de diciembre afecte, cancele o limite dicha concesión", y calificó como "caución insuficiente" los 10.000 euros que propuso Real Avilés GD como garantía para responder de los daños y perjuicios que se le puedan ocasionar a Real Avilés CF porque, explicó, "el coste de la plantilla este año es de 16.970 euros mensuales y con la cantidad propuesta de caución sólo se cubriría el 58, 52 por ciento del coste del primer mes".

El letrado recordó que Real Avilés GD es una SL con capital social de 3.000 euros que ha sido adquirida por López por 1.000 euros, más el pago de las deudas que arrastraba en los dos años que gestionando el club.

En cuanto al periculum in mora, Álvarez explicó que Real Avilés GD "no ha presentado ningún tipo de acción judicial en más de cuatro meses", ni respondió a los burofax de abril en el que se comunicaban la resolución del contrato de gestión ni a otro posterior, "que desde el 4 de agosto está en Correos por la negativa a recogerlo por parte de Real Avilés GD en el que se les notificaban los nuevos incumplimientos por la falta del presupuesto y por romper la cláusula de confidencialidad, y la decisión de tomar el control del club".

Real Avilés GD presentó la demanda de cautelares después del primer partido de Liga en el que el equipo empató (0-0) con el Praviano y puso en duda la calidad de la plantilla para lograr el ascenso. "El equipo está invicto y a un punto del play-off", recordó Álvarez. El letrado, además, habló de la "absoluta mala fe" de la demanda porque, señaló, "desde que se les comunicó la rescisión en abril realizaron el 72,22 por cientos de la contratación de jugadores y a otro más el cuerpo técnico el 8 de agosto". Y concluyó destacando "la mala gestión" de Real Avilés GD que, apostilló, "desde diciembre ha nombrado cinco administradores y cesado a cuatro; y a tres técnicos y destituido a dos con sus ayudantes".