Vencer a uno de los equipos más potentes de la categoría -el Racing de Santander-, no implica que superes al colista con facilidad. El mensaje es claro en el vestuario rojiblanco. Cero confianzas de cara al envite de esta tarde, a las 17 horas, frente al Peña Sport. Sin embargo, sí reina la ilusión para que la buena dinámica del Sporting B se amplíe en San Francisco. Su gran arranque liguero, sumando nueve puntos de los doce posibles puestos en juego, le han colocado en una situación ventajosa de cara a su principal objetivo de la permanencia y con argumentos sólidos para poder soñar con sumar un nuevo triunfo a su casillero.

El conjunto de José Alberto ha sabido asentar sus bases en la categoría desde el principio, sin tiempo para las adaptaciones. El técnico, que parte siempre con la ambición de salir al campo a ganar, no lo será menos en este partido y pone las pautas precisas para que su equipo no se despiste ni un sólo instante. La principal ausencia en la citación será la del guardameta titular Dani Martín, que ayer se encontraba en la convocatoria del primer equipo. Su lugar bajo palos será para Christian Joel, en el que también se guardan esperanzas de futuro. Con las ausencias por decisión técnica de Alday, Pelayo, Espeso y Aizpiri, el previsible once titular sería el formado por Christian Joel; Montoro, Juan Rodríguez, Víctor Ruiz, Ramón; Cristian Salvador, Pedro, Nacho Méndez; Isma Cerro, Cayarga y Claudio. Para posibles sustituciones se encuentran Javi Benítez como portero suplente y los jugadores Cordero, Joel Sanabria, Traver, Bertín, Mateo y Pablo Fernández. El Sporting B ya sabe lo que es vencer a domicilio al superar al Leioa en un terreno de juego dificultoso en la categoría de bronce, una circunstancia que tratará de repetir en San Francisco con el arbitraje del catalán López Jiménez. En frente se encontrará con un conjunto navarro que es el colista de la categoría y que aún no ha sido capaz de estrenar su casillero de puntos, aunque las confianzas no pueden entrar en juego en esta ocasión para evitar perder el rumbo.

Los de Tafalla han caído en las cuatro jornadas que se llevan disputadas por el mismo resultado: 1-0. Un marcador corto que le define como un equipo rocoso, pero que denota una alarmante falta de gol. El Sporting B tratará de seguir la misma línea mostrada ante el Racing de Santander, donde dio un buen recital de su calidad en la segunda mitad disputada en El Molinón. Los rojiblancos quieren dar un paso más en su objetivo a largo plazo, pero manteniendo los pies en el suelo -son cuartos en la clasificación- y sin confiarse en una categoría en la que cualquier equipo puede superarte.

El calendario invita a que el conjunto de José Alberto pueda mantenerse en la zona noble de la clasificación ya que tras visitar al Peña Sport recibirá al penúltimo clasificado, el Izarra, en Mareo. Dos compromisos que sobre el papel podrían ser beneficiosos para que el filial siga sumando, pero los pronósticos hay que plasmarlos sobre el terreno de juego.