Ni Cavaliers ni Rockets. El alero Carmelo Anthony ha estremecido el mercado de conjeturas de la NBA con un golpe maestro que debe oficializare el lunes con su salida de los Knicks para trasladar su carrera a las filas de los Thunder de Oklahoma City, donde ya le esperan para formar un 'trío infernal' con Russell Westbrook y Paul George.

Según las versiones de la prensa estadounidense, la operación se concretó a través de un canje por el que la franquicia de Oklahoma enviará a la de Nueva York a Enes Kanter y Doug McDermott.

A simple vista, la negociación convierte al equipo de Oklahoma en serio candidato al anillo, si funciona la sociedad Anthony-Westbrook-George & compañía.

Y puede ayudar a cumplir el sueño del jugador nacido hace 33 años en Red Hook (Nueva York) de llegar a un equipo con aspiraciones reales de destronar a los Warriors como campeones de la NBA.

Parece quedar claro también que no por mucho madrugar amaneció más temprano para los Cavaliers de Cleveland y los Rockets de Houston.

A la novela que se convirtió la relación entre Antonhy y los Knicks se sumó el equipo de Houston hasta insinuarse como el claro destino del alero, pero súbitamente las negociaciones se enfriaron y la lista de pretendientes del jugador la engrosaron los Cavaliers de Cleveland.

Para aumentar el morbo generado por la inminente negociación en la antesala de la nueva temporada de la NBA no resulta un dato menor recordar que los Thunder debutarán en casa contra los Knicks, el 19 de octubre.

Los Thunder de Oklahoma City pueden celebrar de antemano el gran olfato de sus directivos, que en la pretemporada ejecutaron otra operación de intercambio que cayó como bomba y que permitió la llegada de Paul George en el verano.