Tal como está el panorama de la Fórmula 1, la continuidad de Fernando Alonso en McLaren es lo mejor que podría pasarle al piloto asturiano. Genial en la pista, Alonso ha visto condicionada muchas veces su carrera por las decisiones fuera de ella. A veces por precipitación, otras por despecho, no ha elegido bien sus equipos desde su salida de Renault. Por eso su reencuentro ahora con los motores de la fábrica francesa es una buena noticia. Esperemos que no sea demasiado tarde para celebrar el tercer título mundial, una marca mucho más acorde con la categoría del piloto asturiano.