A la asturiana Beatriz Martínez Sordo le amargaron en la escala de Abu Dabi la medalla de oro que consiguió junto a Antonio Bailón en equipos mixtos en la Copa del Mundo disputada en Nueva Delhi (India). Lo que en principio iba a ser un trámite para su compañero y los otros dos tiradores participantes (Alberto Fernández y Fátima Gálvez) se convirtió en una larga espera de 27 horas, con cansancio y mucha incertidumbre, a cuenta de un supuesto problema con el permiso de las armas.

Beatriz Martínez Sordo (Tiñana, Siero, 6 de marzo de 1986), campeona de Europa y subcampeona del mundo de tiro al plato, llegó a desesperarse a media tarde de ayer, cuando las autoridades de Emiratos Árabes Unidos mantenían su negativa a la salida de los deportistas, por un error de la compañía aérea, Etihad Airways, en la documentación de las armas. El presidente de la Federación Española de Tiro, el asturiano Miguel Francés, puso en alerta a la compañía de viajes y, a partir de ahí, el cónsul en Dubai, Emilio Contreras, se desplazó al aeropuerto. Cuando todo parecía resuelto llegó un giro inesperado.

"Nos encerraron en una sala con policías, que nos acompañaban hasta para ir al baño", explicó Martínez Sordo a LA NUEVA ESPAÑA. "Menos mal que un tirador de este país nos ha traído durante todo el día comida y agua", añadió Beatriz, que apenas pudo dormir desde las 23.40 horas del domingo, hora de Abu Dabi (dos menos en España), hasta las 2 de la mañana cuando, supuestamente, volarían por fin hacia Madrid.

Beatriz Martínez Sordo agradeció "a la embajada, a su cónsul, al Consejo Superior de Deportes, a la Federación Española y a mucha gente que se movió en España" para solucionar el problema. A las 8 de la mañana esperaba aterrizar en Madrid y después coger otro vuelo para Asturias, donde reside, aunque también se entrena habitualmente en Toledo. Miguel Francés explicó que no viajó ningún directivo a la India por la situación económica de la federación y al tratarse de tiradores con experiencia.