Adama Touré está llamado a marcar las diferencias esta temporada en el Avilés, pero el jugador malí, que llegó a jugar unos minutos con el Sporting en Segunda en 2013, no tuvo suerte en este inicio de Liga. Debutó en la cuarta jornada contra el Tuilla en Candín porque fichó tarde, jugó de titular contra el Marino y Colunga, y en la séptima jornada fue expulsado por doble amarilla en Lugones y sancionado con tres partidos por desconsideración hacia al árbitro en la segunda.

La sanción le rompió el ritmo, pero las desgracias no vinieron solas porque tras cumplir sanción sufrió entrenando un pinchazo en el aductor izquierdo que le mantuvo fuera otras tres semanas.

El pasado domingo reapareció para dar los pases en los dos goles de Luis Nuño que dieron la victoria a los avilesinos ante el Roces y el técnico, José Luis Díaz, Xiel, destacó su aportación. "Nos ayudó mucho porque es un jugador diferente que nos viene de maravilla, sobre todo jugando de enganche con libertad que es donde más daño hace aprovechando que tiene buena llegada y muy buen último pase", comentó.

El jugador sintió una "alegría enorme" de verse de nuevo sobre el césped, aunque es consciente de que está muy justo en el aspecto físico. "Estoy muy feliz por jugar de nuevo y me siento bien, pero todavía me falta un poco de ritmo porque físicamente no estoy a tope, pero poco a poco me encontraré mejor para dar en cada partido lo máximo posible para ayudar al equipo".

Y es que al futbolista malí le preocupa la delicada situación del equipo, a dos puntos del descenso. "Tenemos que intentar dar un paso adelante porque tenemos una situación muy difícil y todos somos necesarios para luchar para y salir de la zona baja. Y en eso estamos porque todos queremos dar ese paso", aseguró.

El Avilés juega ahora de forma diferente tras la llegada de Xiel por Iván Palacios hace cuatro semanas y Adama señala que, además de la forma de jugar, cambiaron otras cosas en el vestuario. "Iván fue un buen entrenador, pero había jugadores con muchos problemas que no estaban bien, ahora parece que mejoró la situación porque hubo un cambio de mentalidad en el grupo y es mejor para todo el mundo, por eso creo que vamos a seguir así para luchar por el sitio que se merece el equipo en la clasificación".

El equipo tiene esta mañana (12.00 horas) un difícil compromiso en el Requexón ante el Oviedo B, segundo a cuatro puntos del Marino, y uno de los firmes candidatos al play-off. "Todos los partidos son difíciles, pero hay que luchar y jugar siempre con la ilusión de hacerlo bien y sacar algo positivo porque el equipo lo necesita", concluyó.