Lo primero que se llevó Lidia Valentín nada más subir al podio fue un disgusto. La organización hizo sonar un himno diferente al de España. Ella no daba crédito."Estaba superemocionada. De repente, no sonaba el himno español y me quedé como: '¡No puede ser verdad! ¡El mejor momento y dónde está el himno!'. Después han puesto otro himno que no sé de dónde es y luego han puesto el himno español y me he emocionado, porque la ocasión lo merece", dijo.