La semana se va consumiendo sin que el Avilés haya abonado ninguna cantidad de los tres meses que adeuda a los jugadores y mañana concluye el plazo dado por los futbolistas. Algunos jugadores tienen previsto abandonar el equipo si todo sigue igual al concluir el partido de mañana (12.00 horas) contra el Mosconia en el Vega de Anzo, pero de momento su entrega en los entrenamientos y en los partidos es total y todos están demostrando una gran profesionalidad, como atestigua el técnico, José Luis Díaz, Xiel. "Son dignos de admirar por su comportamiento en esta situación tan difícil. Hacía tiempo que no veía a unos chavales con este compromiso y me da muchísima pena que esto esté así", comentó.

El lado positivo, por buscar uno, es que la situación unió al vestuario como no lo había estado hasta ahora y la muestra fue la piña que hicieron todos al acabar el partido del Plantío abrazándose en el campo. La plantilla se hizo nueva este verano y con prisas pero ahora funciona como un equipo, por eso los jugadores consideran que es "una pena" que se pueda romper por los impagos. De hecho, aún tienen la esperanza de que el club de un paso al frente y cumpla sus compromisos para afrontar con ilusión la segunda vuelta.

De no abonar la deuda, el futuro del Avilés es muy negro porque se pueden ir los jugadores y el club no puede fichar al tener suspendidos los derechos federativos hasta que liquide la deuda de 2.450 euros con el extécnico del juvenil, Iván González, y 2.600 euros con la Federación.

En cuadro. Ayer sólo había en el entrenamiento de La Toba nueve jugadores del primer equipo (incluidos los dos porteros) más Santa y Marcos del filial, el juvenil Barra y el canadiense Adrews, que entrena con el equipo. Expósito no entrenó porque pasó mala noche, y Carlinos, que está sancionado para Grado, tiene permiso para empezar las vacaciones. Coutado, por contra, irá citado ante el Mosconia porque mejoró de la pequeña rotura en el gemelo derecho e incluso puede jugar unos minutos. Xiel tendrá que llamar a tres juveniles para completar la convocatoria. El técnico alerta de los de Grado. "Es un buen equipo, armado y trabajado. Me gusta porque tiene buenos futbolistas y juega bien". Los avilesinos, no obstante, confían en sumar después de las buenas sensaciones que dejó en la Copa ante el Burgos. "Los resultados ayudan y refuerzan lo que hacemos", concluye Xiel.