Zinedine Zidane insistió tras la derrota en que no puede "reprocharles nada" a sus jugadores. "Es difícil porque hicimos de todo para ganar. Hemos tenido muchas ocasiones, pero el balón no quiere entrar. No tengo explicaciones para eso. Es una mala racha que dura demasiado. Es una derrota difícil porque no merecíamos este palo". Zizou quiso ser optimista y aseguró que van a "cambiar la racha. Necesitamos ganar un partido bien. Ojalá que sea el jueves", afirmó.