Llega el derbi y su proximidad se palpa en el ambiente: en Oviedo, en Gijón y en muchos otros puntos de la región. Pero el epicentro de la actividad en el día anterior se trasladó a los entrenamientos de ambos equipos. Real Oviedo y Real Sporting recibieron el calor de sus hinchadas en la última sesión preparatoria antes de la batalla, fijada para mañana domingo a las 18.00 horas en el Carlos Tartiere.

Centenares de seguidores azules desafiaron a las inclemencias del tiempo para acudir al Requexón. Hicieron un pasillo de honor a sus jugadores, con los que la comunión es total después de la dulce racha en la que está inmerso el equipo, encaramado a la parte alta de la tabla de Segunda. No faltaron los cánticos, pero mañana llegará el día marcado en el calendario: la hinchada carbayona está citada a las 15.45 horas en el hotel Ayre para animar a Anquela y sus chicos en su salida hacia el Carlos Tartiere.

Ánimos para el Oviedo antes del derbi

Ánimos para el Oviedo antes del derbi

En Gijón, el último entrenamiento se trasladó al estadio de El Molinón y numerosos seguidores no dudaron en madrugar para acudir a dar aliento a los suyos. La sesión terminó con un gesto de unidad: jugadores y afición cantando al unísono entre el humo de bengalas y otros elementos pirotécnicos. Mañana llegará el desembarco: decenas de autobuses trasladarán a los 1.200 seguidores que viajarán a la ciudad del eterno rival bajo un gran dispositivo de seguridad.

La afición del Sporting se vuelca con el equipo

La afición del Sporting se vuelca con el equipo

No hace falta mucha motivación extra para una cita de este calibre, pero aún así los últimos días han estado plagados de gestos. Así el Real Oviedo lanzó ayer un vídeo motivador, proyectando sobre edificios monumentales de la ciudad momentos de celebración del oviedismo.

Y hoy llegó el turno del Sporting, que apostó por el humor, con un seguidor rojiblanco comiéndose un carbayón.

Entretanto, sobre el derbi se ciernen las dudas sobre el estado del césped del Carlos Tartiere. Oviedo acumula varios días lloviendo, y mañana no parará previsiblemente. Por eso, el Ayuntamiento ha redoblado esfuerzos, aumentando la cuadrilla de jardineros que se encargan del municipal ovetense para luchar contra los efectos de las inclemencias meteorológicas en un terreno de juego que plantea problemas de drenaje. Sea como fuere, ambos equipos llegan con todo a la gran cita.

Las espadas están en todo lo alto. ¿Quién ganará? ¿Habrá empate? Hagan sus apuestas: el derbi ya está aquí.