Medio centenar de partidos de Segunda B y Tercera División de las últimas tres temporadas están bajo sospecha por haber sido presuntamente amañados para realizar apuestas ilegales en casas asiáticas. El partido de Tercera División asturiana entre el Gijón Industrial y el Langreo, disputado el pasado mes de noviembre y correspondiente a la jornada 14 de esta temporada, se ha visto salpicado al figurar dentro de una lista publicada ayer por "El Confidencial" y en la que se incluyen los encuentros bajo sospecha que han sido detectados por Federbet, un organismo sin ánimo de lucro que lucha contra las apuestas ilegales en el deporte y que colabora con la Policía.

El pasado lunes, la Policía detuvo a casi 30 sospechosos de colaborar con una red de amaños de partidos con base en una casa de apuestas en China. Al parecer, esta red, que estaría liderada por dos exfutbolistas, compraba a jugadores de Segunda B y Tercera para amañar, no un resultado, sino otros aspectos del juego como córners o tarjetas. "La Policía nos confirma que el encuentro entre el Gijón Industrial y nuestro club no está siendo investigado", publicó a última hora de ayer el Langreo, a través de su perfil oficial en Twitter. En el Gijón Industrial y el Langreo han mostrado su perpejlidad ante este asunto. Ambos clubes no tardaron en mostrar su repulsa ante "cualquier acción en contra del decoro deportivo" y se pusieron "a disposición de las autoridades competentes para esclarecer cualquier resquicio de irregularidad". El Langreo incluso señaló que en el caso de que algún miembro del club estuviese involucrado en las apuestas de partidos, sería inmediatamente expulsado y la propia entidad emprendería acciones penales contra esa persona.

El máximo mandatario del Langreo, Víctor Fernández-Miranda, recalcó ayer que "hemos hablado con la Policía del Juego en dos ocasiones y nos han transmitido tranquilidad". Para el presidente del Langreo, "el encuentro no está investigado ni bajo sospecha, la única anomalía es que se registró un elevado volumen de apuestas para un encuentro de Tercera, lo que no quiere decir que el partido esté investigado o que el club sea sospechoso". Además, el régimen interno del club impide a jugadores, cuerpo técnico o directivos apostar en encuentros de la categoría en la que milite el equipo. Una filosofía que también impera en el Gijón Industrial. "Trasladamos siempre la información al respecto que mandan desde la comisión de clubes de Tercera y Segunda B", subraya Diego Junquera, máximo dirigente fabril.

En la estadística del partido, a la que ha tenido acceso LA NUEVA ESPAÑA y sobre la que suele basarse este tipo de investigaciones, no destaca ningún dato que se dispare significativamente. El entrenador del Langreo, Hernán Pérez, incluso justifica el hecho de que pueda llamar la atención que hiciera dos cambios en la primera parte. "Son lances del juego: se nos lesionaron dos jugadores y tuvimos que sustituirlos", explica. El técnico recalca que "ojalá algún día pillen a alguien que se haya visto involucrado, lo encarcelen y que sirva como ejemplo". En el vestuario del Industrial, la plantilla no sale de su asombro. "Estamos alucinados. Nadie maneja nada del tema de apuestas y menos aún de un partido propio. Es un sinsentido que exista esta acusación. Tenemos la conciencia tranquila", afirma uno de sus futbolistas.