Coutado y Carlinos, los capitanes del Avilés, comentaron ayer que el vestuario está pendiente de la respuesta del club a la sentada del pasado domingo en El Florán para organizar nuevas acciones de protesta. "Si hay solución no se hará nada, obviamente, y esperamos que esta semana haya un compromiso. En caso contrario seguiremos haciendo cosas para que se nos escuche", señaló Coutado.

"Lo normal es que alguien dé la cara y que nos marquen un plazo. Tampoco exigimos que lo paguen todo mañana, pero hay gente que ya lo está pasando mal y es por ellos por lo que pedimos una solución más inmediata", añadió Carlinos. Los capitanes admiten que "se contaba más o menos con tener problemas y suponemos que al final se acabará cobrando", pero insisten en que hay casos a solucionar de inmediato. "Las cosas no se hacen así y hay gente que nos aprieta porque lo está pasando mal y es su dinero. Por esa gente pedimos que nos den algo, un mes, para seguir tirando y al final de año que cumpla con el resto del pago".

La media de la deuda, dicen los capitanes, es de tres o cuatro meses según la fecha de llegada de cada jugador, aunque algunas voces del club afirman que "de los once que salieron el domingo al campo sólo había tres o cuatro a los que se debía más de mes".

Respecto a la marcha de Domínguez (que se une a las anteriores de Fonso, Adama, Vázquez y Sergio Menéndez por el mismo motivo), Coutado y Carlinos recordaron que "está en su derecho de irse y como él hay más gente que necesita ese dinero para el día a día, sobre todo los que están fuera de casa", y aseguraron que seguirán "dándolo todo" por el equipo. "Lo estamos demostrando cada domingo a pesar de que los resultados no llegan, y que nadie dude que en estos partidos que nos quedan lo vamos a dar todo hasta el final y vamos a agotar todas las posibilidades para salvarnos", concluyeron.