El Caudal se despide de sus aficionados con una prolongación de la aciaga temporada del centenario. Con un partido insulso y una derrota inmerecida, pero con una rara sensación para una afición mierense tan alicaída que se toma a guasa la delicada situación extradeportiva por la que atraviesa el club. A los caudalistas se les iluminó la cara con las paradas, la sobriedad y la valentía del meta juvenil Sergio. Un ovetense que, ayer, se estrenó con nota ante el Barakaldo y que hizo olvidar a los seguidores blanquinegros que en menos de diez días deben formar una junta gestora si quieren que el Caudal siga existiendo.

La temporada concluyó en el Hermanos Antuña con la visita de un Barakaldo que la previa, gracias a resultados de terceros, se ganó el billete para la Copa del Rey, dejando el duelo de Mieres en un mero compromiso rutinario ante un Caudal descendido y que se despedía de su afición. El partido fue la viva imagen de la temporada. Dominio blanquinegro sin pegada y un error en el área mierense fue penalizado para acabar perdiendo cuando no lo merecieron.

Uribe, el entrenador del Caudal, sorprendió con la titularidad del meta juvenil Sergio y fue el mejor del Caudal. Fue valiente por alto y decidido en las salidas por bajo. En el minuto 60 desvió un gran disparo frontal de Ito y en el 81, un cabezazo en un córner de Buenacasa para mantener a los mierenses en el partido. Esa fue la mejor nota de un encuentro habitual esta temporada del Caudal.

Los de Uribe dominaron la primera parte, pero sin crear excesivo peligro. La nota negativa fue en el minuto 12 cuando un golpe de José Picón dejó "KO" a Cristian quien pocos minutos después tuvo que ser sustituido. Este percance hizo que el punta Camochu acabase el partido jugado en el doble pivote junto a Borja Prieto siendo de los destacados por su tremendo trabajo.

En la reanudación, el dominio fue más alterno, pero llegaron las ocasiones. La primera, en el minto 60, en un disparo de Ito que rechazó Sergio y luego, en el 63, un gol anulado por fuera de juego de Baba a Ander Vitoria. El Caudal reaccionó y Borja Prieto pudo hacer el 1-0, en el 68, pero Txusta despejó a córner la volea del blanquinegro.

El partido seguía igualado y sin dominador cuando un error de Pelayo dejó solo a Vitoria con Sergio, pero el meta le dejó sin espacio. Uribe dio entrada al otro juvenil, Pablo y en ese tiempo los vascos tocaron a zafarrancho. Sergio fue providencial al salvar sobre la línea un cabezazo de Buenacasa, pero en el minuto 87 Oca marcó el tanto del triunfo tras el enésimo error defensivo de un Caudal que sigue sin ganar y se despidió dela temporada en casa con una nueva derrota.