Al Marino de Luanco se ha dejado los deberes para la última jornada, pero le basta un empate ante el Siero para ganarse la plaza en la fase de ascenso a Segunda B sin tener que mirar para el Llanes y el Covadonga. Con todo, no piensa más que ganar, lo que le permitiría mantener el tercer puesto e incluso esperar un traspié del Langreo para colarse en la segunda posición.

Para el choque Oli cuenta con 18 jugadores, aunque David González es duda por molestias musculares. Todo apunta a que el técnico repetirá el once que empató en Pravia: Davo en la portería; Borja, Pantiga, Trabanco y Guaya en defensa; Óscar Pérez y Pablo Hernández, en el centro del campo; Quero e Iván Fernández en las bandas, con Riky de media punta y, en punta, Luis Morán.

Además de ganar, el equipo luanquín espera romper la sequía goleadora tras dos partidos consecutivos sin ver portería. De lograr el objetivo, el Marino necesita llegar al play-off con mejores sensaciones de las que está teniendo en esta recta final de Liga.