El piloto ovetense Fernando Alonso se mostró ayer muy contento tras el Gran Premio de España, en el que el asturiano finalizó octavo. "Me voy con muy buen sabor de boca porque tras el inicio creía que iba a ser imposible sacar puntos", explicó Alonso en Montmeló. El asturiano deseó en la previa una carrera loca y no ocultó que la lluvia hubiese beneficiado los intereses de su McLaren, algo que finalmente no se produjo. "Había curvas con sol y otras que parecía que estábamos en una película de miedo. La lluvia hubiese venido bien para poner algo de picante, pero insisto en que son unos buenos puntos para el equipo". Alonso tuvo una mala salida: "La primera vuelta fue mala. Nos quedamos arrinconados en la curva dos y perdimos posiciones. Teníamos las superblandas y habíamos perdido posiciones, cuando nuestra idea era ganarlas", indicó.

El ovetense quiso destacar la regularidad del McLaren en este inicio de campeonato, algo para celebrar teniendo en cuenta las temporadas anteriores: "Hemos estado a un nivel muy parecido. Creo que hemos recuperado esas décimas con alguno de los equipos potentes, pero vemos que Ferrari, Mercedes y Red Bull están muy lejos y eso se hace que la carrera sea algo aburrida".

Alonso se fue muy contento de Montmeló tras varias temporadas sin puntuar en tierras españolas, algo que motiva siempre al asturiano: "Llevábamos varios años sin puntuar aquí y poder terminar la carrera de casa es algo bonito para la afición".