El Real Madrid cerró la Liga con un empate intrascendente (2-2) ante el Villarreal en La Cerámica en un duelo que el equipo de Zinedine Zidane encaró más como preparación y pensando más en la final de la Liga de Campeones ante un rival que fue de menos a más. Con este resultado, los blancos se despiden de cualquier posibilidad de ser segundos, puesto que será para el Atlético. El submarino amarillo será quinto.

En los blancos, debutó Luca Zidane -hijo del técnico- en la portería. En el otro marco, Andrés Fernández vio como Bale, con un disparo ajustado al palo le marcaba el primero, después de las ocasiones de Ramos y Cristiano.

Sin que el partido tuviera un juego brillante, era el Real Madrid el que mejor se manejó. Para ratificar estas sensaciones Cristiano Ronaldo hizo el segundo tanto madridista a los 32 minutos de juego tras una jugada Isco, que conectó con Marcelo para que el brasileño centrase a la cabeza del portugués para definir. Sin embargo, los locales salieron más enchufados en la segunda parte. Recortó diferencias Roger Martínez, con un gol por la escuadra. Castillejo firmó las tablas tras regatear a Zidane, en una jugada donde falló Marcelo. El Madrid puede terminar la liga a 17 puntos del Barcelona y ganar su tercera Champions seguida, el próximo sábado en Kiev.