"El responsable de que no estemos luchando por subir a Segunda B, soy yo". Así de contundente se mostró el presidente del Marino de Luanco, sobre la eliminación de su club, el pasado domingo frente al San Fernando. El dirigente lamenta señala la venta del goleador Jaibo Cárcava al Rayo Majadahonda, con quien este fin de semana logró el ascenso a Segunda División, como "su principal error".

"Por ser bueno, tomé una decisión que ha condicionado el trabajo de todos. Aunque un jugador no hace un equipo, dejándole salir, destroce la plantilla. Se ha visto durante la segunda vuelta, que el equipo ha jugado igual que en la primera, pero nos ha faltado gol", valoró. "Pasamos de estar a siete puntos del Vetusta, a quedar muy lejos de ellos, está claro que me equivoqué, no fue la decisión más acertada", apuntó un Gallego, visiblemente afectado por la eliminación de su equipo en la primera ronda de la fase de ascenso a Segunda B.

Por ahora, el Marino de Luanco no sabe nada de su futuro, más allá de que mañana, la plantilla realizará el último entrenamiento en Miramar del curso, y tras una comida de despedida, cada uno iniciará un camino, sin saber si regresará a vestir la zamarra luanquina. Las dudas afectan al banquillo, si bien es deseo del presidente mantener, en la medida de lo posible, el mismo esquema del año anterior.

"Yo quiero que siga Oli. Mañana podré hablar con él. Si viene un equipo de superior categoría y se lo lleva, me alegraré por él, porque le deseo lo mejor, lo mismo que al resto de la plantilla, ojalá sigan el máximo número de ellos", remató Gallego. El presidente del Marino también valoró como negativo el tercer puesto de su equipo, porque el año que viene no estará en la Copa del Rey. "Es un dinero que perdemos", dijo. Por último, pidió al Ayuntamiento el arreglo del césped de Valbín. "Necesitamos una ayuda en eso", apostilló.