Barcelona

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Oviedo,

Efe / J. C.

La Generalitat de Cataluña plantea que el nuevo sistema de financiación autonómica garantice nivelar la solidaridad entre las comunidades autónomas de manera parcial, de forma que se garantice el 100% de los «recursos esenciales» o «servicios básicos», pero no el resto de los gastos de cada territorio, que pasarían a depender de su propia capacidad. Por «servicios básicos» se entiende la educación y la sanidad, según una ley de 2001 pactada por la Administración central y todas las comunidades autónomas en el Consejo de Política Fiscal y Financiera. Esto no obsta para que, bajo ese concepto, se pueda incorporar en el futuro algún otro contenido si así se pactara. Pero, hoy por hoy, la propuesta catalana implicaría que las regiones contribuyentes netas garantizarían con su esfuerzo de solidaridad la educación y la sanidad, lo que supone cubrir entre el 65% y el 75% de los fondos que actualmente reciben del fondo de suficiencia las regiones que precisan ayuda.

La propuesta catalana figura en el documento «Modelo de financiación de la Generalitat. Pautas básicas para el despliegue del Estatut de Autonomía de Cataluña», que se entregó ayer a los socios del Gobierno tripartito catalán en una reunión que mantuvo el conseller de Economía, Antoni Castells, con los representantes de la parte catalana de la Comisión Mixta de Asuntos Económicos y Fiscales, informó «Efe». Esta concepción ya figuraba en el nuevo Estatuto de Autonomía de Cataluña, explicó a este periódico el catedrático de Hacienda Pública de la Universidad de Oviedo, Carlos Monasterio.

La principal novedad se establece en los mecanismos de nivelación que han de regir los principios de solidaridad, donde se señala literalmente que «si el peso de los servicios esenciales del Estado de Bienestar representan entre el 65% y el 75% del total del gasto público autonómico, se nivelarán el 100% entre el 65% y el 75% de los recursos, y el resto, entre el 35% y el 25%, no se nivelará». De acuerdo con esta tesis, el sistema de financiación autonómica que propone la Generalitat de Cataluña garantizaría la igualdad de prestaciones en todas las comunidades en educación y sanidad (que representan entre el 65 y el 75% del Fondo de Suficiencia), pero no el resto de servicios. El documento recuerda que «en la mayoría de los países federales en los que existen mecanismos de nivelación, éstos son de carácter parcial, como, por ejemplo, Alemania y Canadá».

No tendrían garantizada la cobertura del 100% del coste, por consiguiente, la ley de Dependencia, salvo que se pactara su inclusión entre los llamados «servicios básicos», y tampoco otros fines actuales de la solidaridad interterritorial, caso de las infraestructuras locales, obras hidráulicas, medioambientales y de saneamiento y depuración, agricultura, planes forestales, vivienda, fomento del turismo y otras.

Los mecanismos de nivelación tendrían en cuenta, según el Gobierno catalán, tanto el índice de gasto (los recursos necesarios para prestar el nivel medio de los servicios esenciales de la Generalitat) como el índice de capacidad fiscal (los recursos potenciales).

Para el índice de gasto el documento señala que «la variable básica es la población, rectificada por los costes diferenciales, y la población inmigrante», siendo otros aspectos tales como la densidad de población o el número del personas excluidas socialmente variables con «un papel secundario».

El sistema de nivelación se actualizará cada cinco años y el objetivo del sistema, según señala otro de los puntos, y también recoge el Estatut, es «la aproximación a los recursos de las comunidades forales». Como explicita el texto, «hasta ahora en las negociaciones de financiación autonómica se redistribuían todos los recursos (...), pero a partir de ahora habrá que determinar qué parte de los ingresos tributarios autonómicos es objeto de nivelación y qué parte no lo es». El documento también preserva la bilateralidad entre Cataluña y el Estado, ya que la negociación ha de tener lugar en el seno de la Comisión Mixta de Asuntos Económicos y Fiscales Estado-Generalitat.

Castells pidió a CiU que se sume a la propuesta del tripartito por «patriotismo». El presidente de CiU, Artur Mas, delegó en Frances Homs para negociarlo pero advirtió que sólo habrá posibilidad de acuerdo si se exprimen al «máximo» las potencialidades del Estatuto. El secretario general de ERC, Joan Puigcercós, anunció que su partido planteará un conflicto legislativo si el Tribunal Constitucional recorta el Estatuto catalán. El presidente de la Xunta de Galicia, el socialista Emilio Pérez Touriño, advirtió que no tolerará que se utilicen las balanzas fiscales en la negociación del nuevo sistema de financiación.

Nivelación

La propuesta del Gobierno tripartito catalán plantea que el nuevo sistema de financiación autonómica sólo garantice al 100% la nivelación o igualación entre todas las comunidades autónomas en los «servicicios básicos». Por tales se entienden hoy, según la ley de 2001, la sanidad y la educación, que representan entre el 65 y el 75% de los recursos con los que el Fondo de Suficiencia ejerce la solidaridad interterritorial.

Mecanismos

Los mecanismos de nivelación tendrán en cuenta el índice de gasto (recursos necesarios para prestar el nivel medio de los servicios básicos) y el índice de capacidad fiscal (recursos potenciales).

Variable básica

La variable básica sería la población, rectificada por los costes diferenciales y la población inmigrante. Otros aspectos, como la densidad de población (habitantes por kilómetro cuadrado) y el número de personas excluidas socialmente tendrían un «papel secundario».