Oviedo, Marián MARTÍNEZ

Pol Antràs, premio «Fundación Banco Herrero» 2009, reivindicó ayer ante una nutrida audiencia de empresarios, políticos y académicos, el papel de los economistas ante la crisis. «No somos futurólogos; si lo fuéramos, seríamos millonarios», afirmó como defensa ante las críticas por no haber predicho la crisis económica mundial y que responden, a su entender, «a una concepción errónea de los que son los economistas». Pero ahora, en plena recesión, «es un buen momento para escucharnos, como el enfermo escucha a su médico», aconsejó.

Este joven economista, nacido en Barcelona en 1975 en el seno de una familia de abogados, ha sido galardonado con el VIII Premio «Fundación Banco Herrero» por su brillante trayectoria profesional. Licenciado en Economía por la Universidad Pompeu Fabra, hizo el doctorado en el Massachusetts Institute of Technology. En la actualidad es investigador del National Bureau of Economic Research y del Center for Economic Policy Research, y ha sido profesor visitante en Princeton. Desde 2007 es catedrático de Economía de la Universidad de Harvard.

José Oliu, presidente del Banco Sabadell, matriz del Herrero, señaló que el galardón que ayer se entregó a Antràs es el reconocimiento «al talento y a su aplicación productiva. Al pensamiento libre, joven, académico y no condicionado políticamente para poder aplicar la racionalidad y el sentido común a la hora de atacar los problemas del país y del mundo».

El economista Luis Garicano, que recibió este galardón hace dos años, se encargó de glosar la figura de Antràs, quien le agradeció a continuación «la mejor explicación que he oído del resultado de mis investigaciones», y le aseguró que «siempre ha sido un referente en mi trabajo».

Entre los más de doscientos asistentes estaban los más destacados empresarios de la región, representantes de la patronal FADE y las sectoriales del metal (Femetal) y la construcción (CAC), y de la Universidad, entre otros.

Antràs reivindicó el papel de los economistas, «que no somos futurólogos. Si lo fuéramos, seríamos todos millonarios, y es evidente que no es así», afirmó, para luego defender que han desarrollado «herramientas muy útiles para entender la economía y cimentar su funcionamiento». Tras relatar su trayectoria, explicó el objeto de sus investigaciones, centradas en el comercio internacional y cuyo objetivo es buscar explicación y solución para los países subdesarrollados.

El consejero de Industria, Graciano Torre, defendió el cambio de las empresas asturianas en el comercio internacional. «Quién nos iba a decir hace diez años que un señor nacido en la India sería el dueño de nuestra siderúrgica, o que la familia Cosmen iba a ser la dueña de la empresa más importante de transportes por carretera», reflexionó.

La Fundación Banco Herrero ya ha convocado la próxima edición de sus premios, dedicados a premiar a jóvenes economistas menores de 40 años y ya de reconocido prestigio.