Gijón, R. GARCÍA

Jovellanos dejó «enseñanzas y reflexiones de gran valor en la economía» por eso Juan José del Campo Gorostidi, nuevo patrón de la Fundación Foro Jovellanos, quiso ayer aplicar las ideas del ilustrado gijonés al actual momento de crisis económica. Para el economista, la reforma social tan anunciada por los poderes políticos de distintos países debe reforzar pilares básicos de la sociedad como son la educación y la moral: «La sociedad está enferma, afectada de un grave mal, el peor que pudiéramos tener. Y ese mal de la sociedad no es la escasez de capitales ni la limitación de créditos, sino la crisis de valores».

El doctor ingeniero de Minas, que actualmente ejerce como consejero delegado de la empresa Ideas del Metal, se muestra contrario a la mal entendida unidad económica mundial: «Lamentablemente la globalización, que pudo entenderse como la vía que conduciría al progreso de todas las naciones no ha traído más riqueza ni más bienestar social». Es por esto que a su juicio esta crisis debe aprovecharse para realizar un cambio de mentalidad en los economistas y políticos. Sobre todo estos últimos, que parecen, a juicio de Gorostidi, más ocupados en «obrar para hacer daño al oponente» que en procurar el bien de una sociedad en la que el paro se muestra como «estigma de un fracaso social que a todos nos concierne». El nuevo patrono jovellanista avisa que en contra de lo que ocurre en otros campos de la ciencia, en la economía «la regresión es posible».

La solución a la crisis parece compleja. Gorostidi no se atreve a dar una receta pero asegura que la respuesta no pasa por «regular el mercado hasta estrangularlo». A su juicio, «hay que volver nuestra mirada hacia las naciones más necesitadas para, de esta manera, vislumbrar un futuro mejor. Hacerlo nos conviene aunque sólo sea por interés económico». La clave de la solución pasa tanto por volver la mirada hacia otros países como por tener en cuenta las diferencias existentes entre territorios de España, evitando que la descentralización administrativa del país «haga prevalecer los intereses locales».

Gorostidi cerró su primera conferencia como patrón del Foro Jovellanos recordando unas palabras del prócer gijonés que a partir de ahora le guiarán en su nuevo trabajo como miembro de la institución y le servirán de gran ayuda: «reflexionad, que la instrucción pública es la primera fuente de prosperidad de los pueblos». El ejemplo de Jovellanos perdura pues, como reconoció Gorostidi, «los problemas de hoy desgraciadamente son como los de ayer».