Por la capilla ardiente pasaron, entre otros, para rendir su último adiós «al amigo José Luis»: el empresario y periodista Lalo Azcona; el ex presidente de Arthur Andersen en España, Enrique Álvarez; el máximo responsable de Asturiana de Zinc, Santiago Zaldumbide; el presidente de Ilas, Francisco Rodríguez; el médico Pedro Sabando, también nacido en El Natahoyo y amigo de la infancia del fallecido; el catedrático y economista Álvaro Cuervo; el ex gobernador del Banco de España José Ramón Álvarez Rendueles; el director del Real Instituto Elcano, Gustavo Suárez Pertierra...

Y es que, una vez más, José Luis Álvarez Margaride había conseguido reunir en la capital de España a compañeros y amigos asturianos que en bastantes casos compartieron con el fallecido dos de sus inquietudes vitales: el interés por estar en la primera línea de la actividad empresarial y el apego a Asturias y a Gijón. El sábado, en el funeral que se celebrará a las doce del mediodía en la gijonesa iglesia de San Pedro, muchos otros amigos de Álvarez Margaride le tributarán un homenaje análogo al que recibió ayer en Madrid quien en vida dejó encomendado que sus cenizas fueran esparcidas en Gijón.