Madrid, Agencias

El secretario general de UGT, Cándido Méndez, advirtió ayer de un posible «conflicto laboral de alcance» si se recortan las prestaciones por desempleo en el Presupuesto de 2011, después de que la vicepresidenta económica, Elena Salgado, anunciara que las cuentas del año que viene serán «más restrictivas».

Durante su intervención final en la manifestación del Primero de Mayo en Madrid, Méndez consideró que el Gobierno, a veces, «carece de perspectiva». A su juicio, últimamente el Ejecutivo ha perdido «capacidad de convicción por estar aterrorizado por los mercados financieros». Méndez cargó también contra el PP y lo acusó de ser «poco patriota y poco responsable» al intentar conseguir «a cualquier precio» derribar al Gobierno para llegar al palacio de la Moncloa.

El secretario general de CC OO, Ignacio Fernández Toxo, criticó a aquellos que generaron la crisis económica, que ahora «campan a sus anchas» y «pretenden imponer la dictadura de los mercados sobre la democracia». Y cargó contra el Gobierno porque, a su entender, «no se puede engañar al país dictando que la solución está en la reforma laboral». «Por intensa que sea, no generará el empleo que necesita el país», dijo. El ugetista Méndez también se refirió a este asunto y denunció que la reforma del mercado de trabajo no solucionará el problema del crédito ni suplirá «la necesaria actuación de las administraciones».

La movilización de Madrid reunió a 60.000 personas, según los organizadores, y a 16.000, según la Policía. En España se celebraron en ochenta manifestaciones con motivo del Primero de Mayo.