El sistema público de salud presenta los siguientes riesgos de futuro:

-Crecimiento económico lento o negativo: la disparidad entre la tasa de crecimiento del gasto sanitario y las posibilidades reales de su financiación a medio plazo es la «amenaza más claramente identificada».

-La desafección de las clases medias acomodadas: la falta de agilidad y el déficit de trato del sistema público impulsan la búsqueda de cobertura asistencial privada. «Disminuye la legitimación del sistema», que ahora pasa por ser uno de los puntos fuertes de la sanidad regional.

-El envejecimiento y la dispersión de la población en zonas rurales.

-La falta de cohesión del sistema, que hace más vulnerables los servicios de salud frente a la falta de coordinación de las políticas de personal.